EL PROBLEMA SOY YO

CAPÍTULO 1

"Nueva vida" ese es mi único pensamiento, es lo único que ha pasado en mi cabeza durante los últimos 6 meses y al fin esta frente a mí.

Fue realmente difícil convencer a mi padre de mudarme, pero finalmente lo hice, quería entrar en una universidad pública, ya que estaba harta de todos los lujos, pero mi padre no lo permitió, era una universidad privada o vivir con él, obviamente elegí la universidad privada.

- Aquí están las llaves de su departamento, enseguida le llevarán su equipaje

- Perfecto, muchas gracias – respondo con una sonrisa al encargado de la recepción y me dirijo al elevador

El departamento es un lugar bastante espacioso, lo más hermoso es el ventanal que esta por toda la sala de estar y la cocina, se puede observar la ciudad y es una gran vista.

Entro a la habitación principal, la cual será mi habitación y me tiro en la cama, observando el techo.

Abro los ojos y me doy cuenta de que ya es de noche, ni siquiera me di cuenta de cuando me quedé dormida

- ¡Oh no! Tenía que recibir las maletas – digo para mí misma y me dirijo hacia la puerta.

Las maletas ya se encuentran en la entrada, al parecer tienen llaves de mi departamento.

Agarro las maletas y comienzo a acomodar mi ropa y las cosas que traje de mi casa, que en realidad no son muchas, me comienza a dar hambre y es cuando me doy cuenta de que no hay nada en la nevera y tengo que salir a cenar algo.

Tomo mi bolso  y salgo del departamento, bajo por el elevador y en la recepción pido un taxi, no tarda mucho en llegar.

- ¿A dónde quiere ir señorita? – oh no pensé en eso, no sé a dónde quiero ir y no conozco la ciudad

- No conozco la ciudad... ¿algún café que esté cerca?

- Claro, la llevaré al café más rico que hay cercas – le doy una sonrisa al conductor

- Perfecto, muchas gracias

El lugar es pequeño, pero se ve muy lindo, no hay mucha gente, pero parece un buen lugar, le pago al taxista y me bajo del coche

- Que disfrute su café señorita – el conductor es muy amable

- ¡Muchas gracias! – le doy una última sonrisa y me dirijo a la puerta del café

El clima fuera es bastante frío, pero en el instante en que se abre la puerta se siente el calor y hay un delicioso olor a café.

Me siento en una mesa para dos que esta frente a la ventana, está lloviendo y disfruto ver las gotas de lluvia caer y pegarse al vidrio, luego recorrer lentamente todo el ventanal hasta el final y deshacerse.

- ¿Gusta ordenar? – una joven alta, de piel morena, bastante linda, con una gran sonrisa se acerca a mi e interrumpe mis pensamientos

- Claro, ¿Me puede servir un café negro por favor? – le doy una sonrisa

- Claro, en unos minutos se lo traigo – la joven se da media vuelta y se va.

Giro la cabeza para buscar entre mi bolso un libro y mis audífonos, pero mi vista se queda fija en un chico que está en la mesa frente a mí, cuando llegue no lo note.

Tiene un libro en la mano, pero puedo observar cómo me mira de reojo, es de piel clara, ojos oscuros, casi negros, su cabello negro esta desordenado y las puntas terminan en pequeñas ondas, su barbilla es demasiado fina y perfecta, su nariz es pequeña, sus labios son de tamaño promedio, aunque el inferior más grande que el superior y sus cejas tupidas pero ordenadas, lleva gafas cuadradas que lo hacen ver más atractivo y junto al libro, le dan un toque intelectual. Lleva puesta solo una camisa básica color negro que queda apretada a sus musculosos brazos, físicamente es el chico perfecto.