TOBIAS
Recorrí la mitad de la distancia que nos separaba en muy poco tiempo. Cada vez estaba más cerca. Empujaba a las personas que estaban en el camino hasta que quede a pocos metros detrás de ella. No sabía si debía acercarme más o si sería correcto saludarla o hablar con ella. Un grupo de personas se separaron y giraron a la derecha en un cruce. Solo quedaba una manzana para llegar a mi oficina y decidí que debía hacer algo.
La adelanté y me di la vuelta, de tal forma que quedamos los dos cara a cara. La chica era bajita, a penas mediría uno sesenta y cinco, y tenia unos grandes ojos castaños que me miraban con curiosidad y precaución. Era normal que la situación le pareciese extraña e intenté arreglarlo.
-Hola...yo... lo siento, he debido de haberte asustado, esto te parecerá raro, pero me recordabas a otra persona y he debido de confundirme- era una explicación penosa, pero al menos le hizo sonreír. Tenia una bonita sonrisa, sus gruesos labios se curvaban hacia arriba de una forma dulce y delicada. En conjunto me recordaba Tris, pero era totalmente diferente a ella, era preciosa.
-No importa, me ha pasado antes, no tienes que disculparte- y volvió a sonreír, tenía una sonrisa muy bonita. Tenia una voz melodiosa pero firme. Esta vez su expresión cambió de precaución a diversión y me miraba de una forma extraña sin dejar de sonreír. Me di cuenta de que estaba cortando le el paso, así que me aparté. Ella comenzó a caminar y yo caminaba a su lado.
-Creo que vamos por el mismo camino, ¿te importa si...?
-Ah no, claro que no- volvió a sonreír. Durante el corto trayecto se percibía un silencio incomodo. Me sentía estúpido. Aquella chica me recordaba a Tris, pero tenía algo diferente, y algo en ella me decía que había pasado por mucho. A final llegamos al edificio donde trabajaba a si que entre por la puerta principal, y me di cuenta de que ella me seguía. Los dos caminamos por la recepción hasta llegar al ascensor donde ella pulso el botón de la quinta planta, yo pulse el de la décima.
-Trabajas aquí?- me sorprendió escuchar su voz cortando el incómodo silencio.
-Si ¿y tu?- era una pregunta estúpida, yo me sentía estúpido.
-Si, desde hace poco, me trasladaron aquí hace una semana desde el laboratorio- que raro que no me haya dado cuenta antes. Entonces el ascensor se paró, sonó un timbre y las puertas se abrieron. Habíamos llegado a la quinta planta. Ella salió del ascensor, se despidió con la mano y me dedicó una última sonrisa. Le devolví la sonrisa y las puertas se cerraron.
Llegué a mi planta y me dirigí a mi oficina. Sabía que no podría concentrarme ese día. Me senté en mi mesa y encendí el ordenador. Tenía sentimientos encontrados, por un lado sentía un fuerte dolor en el pecho, por recordar a Tris, el parecido que compartían ella y esa chica me hacia daño, pero por otro lado, no se por qué, pero algo dentro de mi quería volver a ver a esa desconocida otra vez.
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Beating Heart. Fanfic Divergent.
FanfictionUn fanfic dedicado a una gran amiga Carmen. Un final alternativo para Divergente.