Mi Cosmonogía Saint Seiya.

La ley de la Máscara.

Hace mucho años atras todos los 88 saints de Atena eran hombres, la mayoría de estos nacían en Grecia y algunos pocos venían de otros países a servirle a su diosa, Atena.
Ellos no eran escogidos por las estrellas si no más bien eran guerreros que a base de su lucha y constancia logran usar la armadura que sean dignas de poseer y por ende no importaba el lugar y ni la fecha en que nacían.

Una vez, antes de la guerra santa contra Hades, como ya se sabe reencarna Atena, pero por primera vez ella no lo hace en su santuario si no en Rodorio, aldea cercana al santuario.

Aashta, hermana menor de Bluma era la actual reencarnación de Atena, ellas vivían tranquilamente con sus padres de una manera humilde y agradecidas de lo que tenían. Aashta siempre demostró ser una niña muy pacífica, valiente, amable, empatica, y dulce mientras que Bluma era una chica un poco inquieta y con un carácter extraño, odiaba que le dijeran lo que no quería escuchar y las actitudes irrespetuosas, Sin embargo eso no era lo que llamó la atención del santuario, lo que llamó la atención de los caballeros era el nivel del cosmo de Aashta y sobre todo como parecía que ella sabía usarlo.

Los Saints y sobretodo el Patriarca estaban iniciando a entender la lectura de estrella después de 5 años del nacimiento de Atena y ahora ya toman en cuenta dicha lectura para dar armaduras a sus soldados sin embargo, increíblemente notó el Patriarca algo raro sobre la estrella resplandeciente de Atena.

¿Ella ya había renacido? fue el extraño e increíble pensamiento que se le instaló al Patriarca iniciando así su búsqueda.

Aquella búsqueda duró dos semanas donde fueron a Rodorio a buscarla, e increíblemente la reencarnación de su diosa era la misma niña extraña del pueblo, con esta noticia sintieron orgullo y felicidad porque Atena había preferido renacer con humanos humildes y pobres a que renacer al santuario y tener los cuidados de Diosa que tenía, además aquella niña ya había sido observada por su inusual cosmo y enterarse que era de Atena fue una excelente sorpresa. Los padres de Aashta estaban orgullosos y de acuerdo con que ella se fuera al santuario pero Bluma no, ella creía que no debería dejar ir a su hermana, aquello trajo tantos conflictos que sin lugar a dudas fue mucho mas fácil llevarse a Bluma de Rodorio que dejarla en ese pueblo tranquila.

Bluma fue dejada en el campamento donde habitaban las doncellas y se le prohibió ingresar al santuario, ¿Por qué? Porque los guerreros de Atena hace demasiados años prohibían el ingreso de mujeres para que Atena sea la única mujer en el santuario además el primer Patriarca dijo que una mujer en el santuario que no sea Atena es una distracción para los aspirantes a saints y hasta para los mismo saints y por eso sería un error estratégico, con estos motivos no dejaban entrar a ninguna mujer en el santuario.

Bluma fue una chica rebelde que comenzó a quejarse dentro de los campamentos de las doncellas, diciéndoles que esa regla era injusta, algunas niñas estuvieron a su lado y otras trataban de hacerle entender que entienda su posición y sea respetuosa, sin embargo Bluma jamás lo entendió y se quedó todos esos años que no podía ver a su hermana menor entrenando sola, pues aveces se ponía en riesgo y se paseaba por los límites del santuario para observar como entrenaban los aspirantes y escuchar los consejos.

Después de una década, donde las hermanas tenían 15 y 17 años respectivamente se da comienzo a la guerra santa contra Hades, donde las doncellas evacuaron del campamento a Rodorio pero Bluma preocupada por su hermana se infiltra en el santuario, con una ropa que hacían que no se distinguiera su cuerpo femenino y una máscara en su rostro.

En un momento en la guerra donde algunas casas fueron destruidas, y algunos saints ya habían muerto a manos de espectros, Bluma encuentra a su hermana cansada por estar protegiendo el santuario con su cosmo, al ver esto se preocupa y se ubica a su lado abrazándola, Aashta mirá con ojos enemigos a Bluma, porque con ese disfraz no sabía que era ella pero Bluma al notar eso se quita la máscara para dejarla ver su rostro, inmediatamente Atena la reconoce y se alegra de verla pero le pide que se aleje del campo de batalla.