Hiperventilación [taejin]

10

La mañana del viernes tenía a Taehyung con los pelos de punta, por la noche se llevaría a cabo la reunión y si no fuera por Jimin él estaría colapsando ahora mismo, empezando por no saber qué ponerse.

—Jimin, ¿qué me pongo? —suspiró rendido observando el closet.

—Guapo porque hermoso ya estás —respondió levantando la vista de su celular mientras rodaba en la cama de Taehyung.

—Cállate.

—Si yo fuera a ver a mi ex de hace 9 años... —dijo con todo burlón.

—No es mi ex —Taehyung frunció el ceño volteando a ver al castaño.

—Como sea, si yo fuera a ver a ese sujeto, me iría sexy. Ya sabes, que se de cuenta de lo que se perdió.

—No sé por qué te pedí ayuda.

—Sabes que tengo razón.

—Igual hace frío, aún si quisiera, no podría.

—Qué es un poco de frío cuando puedes levantar suspiros de tu ex.

—Basta, no es mi ex. Solo quiero mirar —dijo ya sin ánimos.

—Aburrido. Ve por él —dijo Jimin determinado.

—No creo que sea posible de todas formas, no le gusté antes, no lo haré ahora.

—Ok, te diré esto, y que Yoongi no se entere pero eres demasiado atractivo, créeme, el que terminará rogando será otro.

—Siempre me subes el ánimo Jiminnie, promete que estarás cuando llegue a casa llorando —dijo Taehyung con un puchero.

—Mmm cuando vuelvas a casa llorando dices, ¿tenías pensado en volver? —respondió con un toque pícaro en su tono.

—Sí, no espero nada.

—Ya veremos, de cualquier forma estaré por aquí si me necesitas, ya sabes, cruzando el pasillo ¿sí?

—Gracias por esto.

—Cuando quieras, ahora, ¿te llevarás eso?

Taehyung dio un suspiro asintiendo, sentándose a un costado de Jimin llevando entre sus manos su abrigo amarillo. En parte era su favorita, en parte le traía recuerdos. Al final optó por pantalones de mezclilla y un suéter cuello de tortuga.

El nudo en su estómago se tensaba conforme pasaban las horas, repasaba en su mente sus técnicas de relajación para poder sobrellevar la noche. Honestamente ni siquiera sabía cómo interactuar con todo el grupo, mucho menos cómo volver a ver a Seokjin luego de tantos años, estaba nervioso y la ansiedad se lo estaba comiendo vivo.

...

La noche llegó y Seokjin se observaba por última vez en el espejo tratando de convencerse a sí mismo de ser valiente y salir por esa puerta.

Pensó por unos momento qué diría al llegar, ¿seguirá siendo querido por sus compañeros?

Ellos nunca supieron exactamente lo que pasaba entre Taehyung y él; muchas malas bromas al respecto y todos los recuerdos venían uno detrás de otro, desearía haber sido más valiente y evitar todo este manojo de nervios que era en ese momento, realmente todo hubiera sido más sencillo de haber hablado con la verdad y no hacer caso de comentarios, pero al ser adolescente no pensaba con la claridad que requería.

Suspiró revisando meticulosamente sus accesorios, observó un anillo dorado que conservaba de su madre y decidió colocarlo en su dedo anular izquierdo. Ante sus ex compañeros no quería parecer un solterón, no necesitaba que hicieran tantas preguntas acerca de su vida amorosa, pero ¿eso no era continuar con una fachada falsa de él mismo?