Capitulo 5.

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Se podía ver a nuestro protagonista caminar con mucho sigilo por las oscuras calles de la ciudad de Kuo mientras observaba como en el cielo volaban las Gargolas con dirección a la catedral el castaño decidió entrar a un edificio algo antiguo y olvidado en el cual se encontraban Xenovia e Irina las cuelas estaban sentadas en el suelo.

Xenovia: Y bueno ¿Cuál es el plan?

Issei: Ustedes harán lo que tengan que hacer-Dijo tomando sus armás-Yo iré por Leonore.

Irina: Espera, que acaso no quieres nuestra...

Issei: Será mejor que cierres la boca, aún recuerdo cómo tú junto a esa sucia familia me humillaban junto a mi hermana.

Xenovia: A que se refiere Irina?

Issei: Que acaso no le dijiste?

Irina: Eh este yo...

Issei: Enserio crees que mereces ser un ángel después de todos los pecados que has cometido.

Irina: I...Issei yo lo...

Issei: Solo mereces pudrirte en las calles mientras ese sueño tuyo se va alejando de poco a poco.

Tras decir eso Irina solo cae de rodillas mientras lloraba a mares ya que era cierto, no merecía ese honor, no merecía estar con los ángeles después de los pecados que cometió.

Xenovia: Dime ¿Por qué le dijiste esas cosas?-Pregunto mientras ponía su espada en el cuello del castaño.

Issei: Por qué es la verdad-Dijo mientras quitaba la punta de la espada con su sinfilo-Ella junto a la familia Hyodou me golpeaban, me humillaban, me torturaban como si solo fuera un juego para ellos.

Xenovia volteó a ver a Irina la cual solo desvió la mirada mientras aún lloraba haciendo que Xenovia vea que era cierto lo que decía.

Xenovia: Te pudo disculpas-Dijo guardando su espada y haciendo una reverencia

Issei: No me interesa-Dijo dándose la vuelta para irse.

Xenovia: Déjanos ayudarte por favor-Dijo sujetándolo del brazo.

Issei: Por qué debería confiar en ti?

Xenovia: No lo hagas, yo misma me ganaré tu confianza.

Tras decir eso el castaño la volteó a ver pero al hacerlo se perdió en su bellos ojos ámbar mientras ella también se perdía en sus ojos avellana que aunque demostraban que no tenía alma aún así demostraba que aún tenía algo de humanidad.

Issei: Quédense aquí-Dijo para soltarse del agarre de la peliazul.

Xenovia: Pero...

Issei: Volveré, solo esperen aquí.

Después de decir eso salió del edificio mientras dejaba ahí dentro a Xenovia la cual tenía un pequeño rubor en sus mejillas y a una Irina la cual vio todo lo que pasó entré ellos 2 y sentía un dolor horrible en su corazón.

Con Issei: El estaba caminando por las calles de Kuo con mucho sigilo con dirección al viejo teatro, pero al estar cerca de la entrada pudo ver a una Gárgola volar encima de el así que sin más que esperar entró viendo a Leonore siendo sujetada del cuello por Zuriel el cual miraba el techo el cual se hizo un hueco saliendo Gideon.

Zuriel: Quédate dónde estás Gideon!

Gideon: Su majestad ¿Está bien?

Leonore: Gideon no debiste venir.

Yo soy Frankenstein.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora