~Capitulo 21~

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Narrador omnisciente

La pareja regreso al hotel dónde se hospedaba Diana e ingresaron a éste, encontrándose en el pasillo con Andrew.

Andrew: Hola! ¿Cómo les fue?.... ¿Qué rayos les pasó? ¿Porqué Atsuko Kagari tiene sangre en la cabeza? ¿Y porque tú te vez como si una manada de lobos de hubiera correteado?

Diana: Andrew...son muchas preguntas, me gustaría contestarlas, pero ¿Podrías esperar hasta mañana? Estamos un poco cansada.

Andrew: Entiendo... Descansen y mañana hablamos.

Diana: Gracias Andrew.

La joven Cavendish entró a la habitación llevando de la mano a una muy adormilada Akko.

Diana: Llamaré a tus padres para que vengan por ti.

Akko: Mmm... ¿Me puedes dirigir a la cama? ¿Mis pies ya no aguantan más?

Diana: Jeje está bien. (Guiando a Akko a su cama para sentarla con delicadeza) Iré por mi teléfono.

Akko: Mmm... (Dejándose caer en la cama cerrando los ojos)

Diana: No te quedes dormida. (Buscando su teléfono)

Akko: ¿Puedo quedarme contigo? Solo por ésta noche...

Diana: Pero...

Akko: Solo mándales un mensaje diciéndoles que Estoy contigo, así no se preocuparán.

Diana: ¿Estás segura?

Akko: Si.

Diana: Está bien.

Después de unos minutos de escribir en su teléfono y mandar el mensaje, Diana se sentó en una esquina de la cama, la castaña al sentir el peso de la oji azul, se acercó a ello y recostó su cabeza en su regazo.

Diana: .....

Akko: Eres cómoda.. ¿Te estoy molestando?

Diana: N-No, es solo que me tomó por sorpresa.

Akko: Jeje entiendo, solo será un breve momento... (Cerrando sus ojos)

Diana: Está bien, descansa. (Acariciando los mechones de ella japonesa, viendo detenidamente cada detalle de su rostro)

Narra Akko

Si tan solo ella pudiera verse así misma...es bellísima, todo de su persona, me alegra haberte conocido.

Narrador omnisciente

La joven Cavendish besó la frente de la castaña con delicadeza, brindándole más caricias en su rostro.

Diana: Está profundamente dormida..

Diana cargó con cuidado a su novia y la acómodo en la cama para después taparla con las cobijas y rodearla en sus brazos soltando unas cuántas lágrimas. Le dolía el saber que no estaría a su lado por más tiempo, se sentía culpable por tener su enfermedad.

A la mañana siguiente Akko fue despertando y estirándose.

Akko: Ahhh que bien dormí.

Diana: Me alegra.

Akko: Oh, ya estás despierta jejeje.

Diana: Si, desperté hace poco.

Akko: Gracias por dejar que me quedará contigo.

Diana: De nada, cómo sigue tu cabeza, te limpie un poco, por fortuna no fue una herida grave.

Akko: Jeje descuida, sobreviviré jeje.

"La chica de ojos carmesí" (Terminada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora