Mi vida ha cambiado tanto en estos pasados tres años, me volví una persona fría, el corazón quedó guardado dentro de unas rejas más fuertes que las que se utilizan en una cárcel de máxima seguridad. No confío, no creo en el amor tampoco en las amistades. Las experiencias me han vuelto una persona terriblemente selectiva. Todo esto debido a un fracaso amoroso y fallas de personas que un día llamé amigos/as. Soy una persona con un gran corazón y eso solo me ha traído decepciones, las personas siempre juegan conmigo, me utilizan, juegan conmigo y se van dejándome sola y todo el daño hecho, lo que me convirtió en una persona que también le gusta jugar. Pero, en el fondo, sigo siendo esa chica buena, lo que sucede es que ya no confío. Me encantaría, pero no puedo, confiar no me ha dejado nada bueno.
¿Llegará alguien que me cambie el pensar y me demuestre que sí puedo confiar en amistades y volver a creer en el amor?
Para que entiendan, los invito a leer mi nueva obra que será producida bajo los efectos del aburrimiento durante la cuarentena. Espero les guste.