Culpa

Esta sentado, refunfuñando en voz baja ante la risa disimulada de su familia por no poder evitar ser tan quejumbroso. Su madre es la que menos puede estar seria, ya que sabe la razon por la que su hijo esta de ese humor. Todo se debía a que en unos dias seria la fiesta de cumpleaños de Geum Jan Di, cosa que por ser amiga de muchas personas importantes, se ha vuelto todo un evento y era obvio que el heredero del grupo mas importante de Corea queria escoltar a su novia. Pero hubo una cosa que corto sus planes, nada mas y nada menos que el mejor amigo de Jan Di, Yoon Ji Hoo.

Durante los 4 años que estuvo lejos, Ji Hoo habia sido el escolta de Jan Di en esos eventos y cuando Joon Pyo regreso, la chica le habia prometido que lo seguiria siendo hasta que este estuviese en una relacion o ella estuviera casada. Cosa que obviamente molesta a Joon Pyo, al final su madre lo convence de dejarlo pasar diciendo que después de todo ella es su novia y la tendra el resto de la noche. Sin saberlo su madre ha tocado un punto fragil en su hijo, que al final èl se quedo con Jan Di.

El dia de la fiesta ha llegado, los invitados esperan en un salon de la Fundacion de arte mientras Jan Di y Ji Hoo se preparan para entrar. Cerca de la hora indicada, el joven heredero va en busca de ambos hacia la sala donde se supone que deberian estar y se queda de piedra al escuchar una melodia suave venir de una sala diferente, mucho mas parecida a un salon de clases con sillones rodeando un punto en medio. Ahi Ji Hoo toca una melodia suave y tranquilizadora en el piano y Jan Di, lo mira con dulzura y cariño hasta que termina la pieza.

-Hermosa, como siempre- elogia la chica dando aplausos sordos.

-Gracias, siempre es lindo recibir halagos de mi fan numero 1- bromea el chico y se deja caer en el sillon contiguo -Ah, que fastidio.

-¿De que hablas?

-Cuando se casen ya no podre hacer esto para ti- dice y toma la mano de la chica, dando suaves masajes con su pulgar al dorso -Calmarte cuando tengas nervios, ser el primero en verte con tus hermosos vestidos, monopolizar tu tiempo antes de la fiesta.

-Bueno, falta algo de tiempo para eso Ji Hoo- dice ella, regresando el apreton de su mano -ademas falta bastante para eso.

-Jan Di, yo... se supone que el debia decirte, pero...

-Quiere que vuelva con el a New York, pronto- dice ante los sorpendidos ojos de ambos chicos -lo se, la verdad es que no tengo planes de casarme hasta que termine las practicas y... no se como decirle a Joon Pyo, pero no puedo irme de Corea aun.

-Dime porque- la frase de Ji Hoo es suave y exigente, con un tono dulce y la mirada directamente en la de Jan Di, accion que ella regresa -No es por la escuela, estoy seguro.

-No, como siempre soy facil de leer para ti- responde sonriendo y de pronto pareciera que los rodea una burbuja impenetrable -Es mi familia, tengo una familia aqui que no puedo dejar.

-El los llevaria de ser necesario.

-Tu y yo sabemos que tengo otra- el entendimiento en esa frase hace a Ji Hoo acercarse un poco mas -Cuando comence a considerar las cosas que debia dejar, aquellas que el no podia llevarse hasta alla, la primera persona en mi mente fuiste tu. Tu, el abuelo, Yi Yung, Ga Eul, Woo Bin. Todos ustedes son mi familia y no pienso ser de esas personas que se ven de vez en cuando, cada que pueden. Tampoco pienso estar lejos de ti, eres parte de mi vida ahora Ji Hoo.

La mente de Joon Pyo viajo rapidamente a todos los momentos en que fue Ji Hoo y sus amigos quienes la salvaron, en los cuatro años que ella estuvo a su lado apoyando su sueño. Ella no era suya solamente, nunca lo fue. Por primera vez en meses se planteo la idea de que en realidad debio rendirse despues de cancelar la boda con Jae Kyung, dejar que Ji Hoo y Jan Di estuviesen juntos. Todos lo podian ver, hasta el, lo que esos dos tenian eran una conexión unica donde no existia nadie ademas de ellos, donde la vida se hacia mas facil, podian ser ellos sin represalias y hablar sin usar palabras. Jan Di le habia dicho alguna vez que Ji Hoo siempre seria su alma gemela.