CAPÍTULO XXXIV

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Cuando Támara y David se quedaron solos en esa pequeña sala, Támara saco tema de conversación.

-David...puedo hacer unas preguntas  -se giro un poco para verlo a la cara.

-Claro, dime  -dejó de beber su vaso de café.

-¿Tú cómo describirías tu vida ahora con Lissa?

-Bueno seré sincero, es muy buena, demasiado perfecta para mí. Llegar a casa y observar a Lissa con sus trajes de faltaba saco, subida en tacones, mientras carga a Caroline y juega con Dav, con un montón de trabajo a su lado...

-Esa es una respuesta demasiada perfecta para mí  - se rio

-¿Por qué la pregunta? ¿Tienen problemas tu y Owen?

-No, no, no. Estamos muy bien...solo que...mi vida de casada es solo estar en casa, haciendo labores siento que...

-¿Quieres realizarte? ¿Quieres hacer algo de tu tiempo aparte de estar solo en tu casa?

-¿Cómo lo...

-¿Cómo lo supe? Fácil. Lissa y tú casi son debía misma edad. Después de que Lissa me dijo que estaba embarazada de Caroline, le pedí que no trabajara un año en lo que Dav crecía más, pero como ya sabemos tengo una esposa testaruda que hace lo contrario de lo que le pido, así que siguió en lo suyo con condiciones mías, no quería que lo de Dav se volviera a repetir...

-¿Crees que sea buena idea planteárselo a Owen?

-Este esposo, debe comprender de igual manera, ya no estamos en la época en que las mujeres solo eran criadas por su madres para únicamente atender su familia y casa, ya no somos tan...primitivos

-Tienes razón ah...otra cosa ¿Es difícil tu vida de esposo y padre?

-Debo admitir que ser padres es algo agotador. Cuando Dav era bebé como Caroline no la pasábamos 70% despiertos y 30% dormíamos, pero nos encanta el hecho de tener una parte suya y mía en ellos, conforme paso el tiempo terminamos acostumbrándonos. Mi vida como esposo es perfecta en ciertos términos, aunque como todo hay momentos arriba y otros abajo, pero todo se arregla como personas civilizadas -

-Espero que este bebé nos haga más dichosos de lo que ya somos -sonrió.

-Por cierto que será ¿Niño o niña?  -David bajo la mirada al vientre de ella.

-Es un niño  -deslizo su mano en su vultado estómago.

-Supongo que Owen esta fascinado

-Demasiado  -soltó una risita leve  -Oye David. Jordy se pondrá bien verdad?

-Si, así será... -David miro el elevador que abría las puertas y luego observo de nuevo a Támara -¿Te...preocupa él...?  -la miro con curiosidad su rostro esperando ver un gesto.

-¿Está mal que después de lo que pasó, me sienta mal por él?  -comenzó a jugar con las manos por los nervios y sus mejillas poniéndose coloradas.

-No, no está mal. Si la pregunta te incomoda no la contestes, pero...¿Sientes algo aún por mi hermano? -la observo, esperando su respuesta.

-Ay David... -soltó un suspiro y subió la mirada hacia el techo perdiéndose en la nada  -...lo de Jordy y yo, comenzó tan bien, al inicio le creí que me quería, pero parecía que la única enamorada era solo yo, era como si él...como si...no existiera una segunda persona en su vida.

-Lamento escuchar eso. Pero eso tengo que tomarlo como "Si, aun existe algo por él" O "No, eso ya fue"

-La primera, pero eso no significa que Owen no lo ame. Jordy no termina de salir del todo de mis sentimientos... -respondiendo algo apresurada la oración.

-Entiendo...debe ser complicado estar dividida  -hizo un gesto de desanimación.

-Más que eso...

Del Deseo A La Tentación Parte 2Donde viven las historias. Descúbrelo ahora