Lara.
–Así que los encontraste teniendo sexo en el carro? - pregunto Ana desde la cocina mientras le contaba lo sucedido en la mañana.
Ya no le tenía que contar nada con respecto a Santiago. Ya lo sabía todo.
–Para tu gran sorpresa Lara, no veo nada de raro en eso. Somos jóvenes. - dijo Anastasia.
Yo sabía, lo sabía.
–Estaba con la estúpida de Blair.- dije.
Anastasia y yo compartíamos muchas cosas. Amistades, ropa, pasatiempos, todo. Pero el odio por Blair, era algo también de lo cual compartíamos bastante.
No ocultábamos nuestro desagrado con respecto a esta chica.
–Me cae tan mallllll.- dijo Anastasia resaltando lo mal que le caía.
La polly no tenía un carácter muy llevadero que digamos, era muy engreída.
Seguíamos hablando mientras mi mejor amiga me contaba sobre su día en la universidad, seguidamente la llamo su novio Jhon.
–Ya llegaste cielo?- pregunto Anastasia toda cariñosa.
Mientras caminaba de un lado al otro hablando con Jhon, cosas del amor definitivamente.
Yo veía el cielo mientras tanto, se notaba que se acercaba la lluvia por lo gris que estaba.
–Ya voy. - termino de decir Anastasia.
De seguro iría a donde Jhon, estos dos ya no podían estar separados ni un minuto.
Volteo y me analizo por un momento.
–Vendrás conmigo? - pregunto Anastasia, no podía creer lo que me había preguntado.
–Están los amigos de Jhon...- dijo y no hizo falta seguir la conversación para que se diera cuenta, que yo no iría a ese apartamento.
Se marcho de inmediato.
Primero muerta a conseguirme con las personas que menos soportaba en este momento.
Mi teléfono comenzó a vibrar y la pantalla se alumbro con el nombre de Luke.
De seguro había venido con la cuerda de idiotas de sus amigos.
–Supongo que ya llegaste. - conteste. Quise sonar lo más uniforme posible con mi voz, lo más neutro. No me pondría nerviosa por un chico.
–Hola, sí. Estoy en tu puerta. - dijo y en seguida sentí como me sobresalte.
Lo tenía en la puerta de mi casa y en solo minutos ya estaba nerviosa.
Y ahí estaba, con la misma ropa de esta mañana, pero a diferencia que tenía el cabello despeinado. Lucia aún más guapo, era impresionante este chico.
–Hola. - titubee, pero en seguida recobre la compostura. - Aquí tienes la llave. - entregándole la llave de su moto en la mano.
¿Como haría para llevarse la moto, si había traído su carro?
–Gracias, no sabía que te gustaran las carreras de motos. - y ahí venia de nuevo buscándome conversación.
–Si, en Londres iba a las competencias. - dije.
Nos miramos por un buen tiempo, esto me estaba poniendo aún más nerviosa.
Contrólate Lara.
–Que bueno, a las chicas no les gusta mucho ese tipo de actividades. Pero creo que tu eres la excepción a todas las demás. - dijo y lo sentí como un cumplido.
Solo sonreí a su halago.
–No vendrás al apartamento de Jhon?.- pregunto.
¿Otro más, todos creían acaso que por ser vecina de Santiago nos llevaríamos mejor?
–Umm, creo que mejor no. Sabes que las cosas conmigo ahí... estarían un poco tensas. - dije.
–Está bien, nos vemos en la universidad supongo. - dijo, esperando a que yo dijera algo más.
–Supongo que si. - Respondí tontamente.
Lara cagándola desde los años 1995. Me dije mentalmente.
¿Pero que podía hacer? No sabía si este chico era igual que sus amigos, por más guapo que fuera. No sabía que buscaba con tanta amabilidad.
Me pellizqué un dedo para sacarme esos pensamientos y le sonreí. Luke hizo lo mismo despidiéndose.
Yo cerré la puerta y me lancé enseguida en el piso.
–Estúpida Lara, estúpida, estúpida. - dije varias veces.
Pero mejor así, no dejaría que nadie traspasara las barreras que me había creado para protegerme.
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Aléjate o déjate llevar
Roman pour AdolescentsLara y Santiago, muy diferentes pero al mismo tiempo tan iguales, con las mismas ganas de comerse al mundo. Lara es una chica fuera de lo común, desde su aspecto hasta su personalidad ruda y fuerte, chocara con Santiago al demostrar de verdad que un...