----𝐏𝐫𝐨𝐥𝐨𝐠𝐨 | ˚ ੭ु⁾⁾·°˖ ₊˚.

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Pov's narradora

Era un día normal en la madriguera. La Sra. Weasley se despertó y bajó a la cocina a preparar el desayuno para sus 10 hijos, si 10 hijos. Cuando terminó decidió ir a despertarlos. Empezó por Bill y luego Charlie. Subió otro piso y llegó a la habitación de Percy, quien ya estaba despierto y leyendo un libro, luego fue al otro lado del pasillo y fue a la habitación de los gemelos. Terminó el pasillo y llegó a la habitación de las trillizas quienes cada una eran muy diferentes. Por un lado estaba Charlotte, a la que llaman Lotte, quien era fría y no solía mostrar sus sentimientos pero con sus amigos y familia era un poco más flexible. Luego estaba Yaniss, la mayor, es muy valiente y protege a sus hermanas con todo su ser, además es atrevida y bromista. Y por último la más pequeña, Rose, ella era la más atrevida y la más bromista de las 3 pero a la vez le encanta leer y sin estudiar le va bien en los estudios, nadie la entiende. Cuando por fin las consiguió despertar subió al último piso donde se encontraban las habitaciones de Ron, de Ginny y la suya. Despertó a los pequeños y todos desayunaron.

—¡Percy pásame la sal!—gritaba desde una punta de la mesa Lotte.
—Levántate tú—responde Percy malhumorado, esas trillizas lo desesperaban.
—Es nuestro cumple se un poco menos... amargado—dice Yaniss burlonamente.
—¡Yaniss! Trata bien a tu hermano ¿quieres?—le llama la atención su madre.
—Ronnie, el pollo es para comer—le reprochaba Rose a su hermano pequeño.
—Pero yo quiero ahora—decía el pequeño frunciendo el ceño.
—Pues entonces para comer no tendrás, ¿quieres eso?—le responde ella alzando una ceja.
—No no no—niega Ron.

La madriguera era una locura todos los días pero al ser tantos aprenden cosas como compartir y ser humildes debido a su baja economía, pero sobretodo, a quererse. Quizá unos se soportan menos que otros, pero se quieren y eso es lo que cuenta.

A cosa de las 11 de la mañana cuando Lotte fue a por comida encontró a tres preciosos búhos en el alféizar de la ventana. Como no sabe que abrir la ventana es lo mejor, gritó, después de entrar en una crisis existencial de si esas cartas eran para ella y sus hermanas o eran simplemente el correo. Yaniss y Rose en cuanto escucharon el grito corrieron a la cocina a ver si le había pasado algo. Lotte solo señaló a los búhos y Yaniss se quedó tranquilizándola y Rose fue a abrir la ventana. Cogió las cartas y les dió de comer a cada una, después se fueron volando. Rose al ver que eran para las trillizas se puso a hacer un baile extraño. Sus hermanas la miraron interrogantes.

—Nos vamás a Hogwarts—fue lo único que dijo.

Después de bailar cosas extrañas cada una por su parte se dignaron a abrir las cartas. Su familia fue a la cocina a preguntar si estaban bien ya que escucharon como se caía una cazuela, una silla y un vaso de cristal. Al verlas con las cartas las felicitaron y Ron y Ginny las miraban con envidia.

—Ey chicos...—empezó Yaniss dirigiéndose a los más pequeños de la casa.
—Recordad que solo os quedan...—la siguió Lotte.
—1 y 2 años para...—siguió Rose.
—¡Ir a Hogwarts!—terminaron las 3 juntas

Los pequeños rieron  y luego Molly puso una cara seria a lo que las trillizas pusieron cara de no haber roto un plato en su vida.

—Recoged todo lo que habéis tirado y poned la mesa. Bill, pasa la escoba y...—no siguió porque Bill lanzó un hechizo y ordenó la cocina—o haz eso.

LAS HERMANAS WEASLEYDonde viven las historias. Descúbrelo ahora