LIES | ÉLITE

ғɪғᴛᴇᴇɴ: ᴘᴜɴɪsʜᴍᴇɴᴛ ᴡᴇɴᴛ ᴡʀᴏɴɢ

(Lunes)

- ¿Jane? ¿Estas despierta? -Le pregunto Ander mientras comenzaba la llamada

- Son las 5:30 de la mañana, ¿crees que voy a estar despierta? -Le contesto Jane restregando sus ojos

- Es que quería decirte que no voy a la escuela hoy. Ya sabes, para ayudar a Omar con las cosas del apartamento. -Le dijo Ander

- Bien, no te preocupes. Mientras todo se haga mas rápido, mejor. -Le contesto Jane

- Bien, si acaso te veo en tu casa o algo así. -Le dijo Ander

- Como tu quieras, aunque las cosas en casa no están tan bien así mejor nos vemos en otro sitio. -Le contesto Jane dando un suspiro

- ¿Paso algo malo? -Le pregunto Ander

- Te lo digo mejor en otro momento, las paredes últimamente escuchan. Bueno, me tengo que ir. Hablamos después, ¿si? -Le contesto Jane

Por otro lado, la madre de Jane se encontraba en la cocina con un vaso en sus manos. Cristina miraba el vaso con mucha pena, aunque desvió su mirada cuando entro José a la cocina.

- ¿Estas seguro que esto es una buena idea? -Le pregunto Cristina mirando el vaso

- Mi amor, Jane merece un castigo después de como nos hablo anoche. Si ella no quiere aprender por las buenas, entenderá por las malas. -Le contesto José, quien tenia un paquete pequeño en su mano

- ¿Tanto le vas a echar? -Le pregunto Cristina mirando el paquete, que tenia una sustancia blanca

- Tiene que aprender por las malas. Así no se le habla a sus padres, nosotros le hemos dado todo para que ella nos hable así. Encima con invitados en la casa. -Le contesto José poniendo el paquete en la mesa

- ¿Y si se muere? Ella nunca a tomado droga, y no sabemos como su cuerpo reaccionaria a la droga. -Le dijo Cristina

- Tendremos que ver, ahora ponlo antes que ella baje. -Le ordeno José

- ¿Y que excusa le vamos a dar para que se lo lleve? -Le pregunto Cristina abriendo el paquete

- Bueno, ayer ella no comió nada. Le diremos que tiene que tomar eso si no quiere que se desmaye. -Le contesto José

- Ojala sea así de fácil. -Le dijo Cristina echando la droga dentro del vaso, que tenia jugo dentro

Jane termino de arreglarse, y se encontraba repasando para el examen. Estaba nerviosa, pero no por lo que pudiese pasar con Guzmán, sino porque verías a sus padres. Después que ella se fue, no los volvió a ver. Tenia miedo que la golpearan o algo así.

La chica bajo a la cocina, y se encontró a sus padres. Quienes estaban comiendo, mientras hablaban.

- Que incomodo. -Susurro Jane mientras abría la nevera

- ¿Ni buenos días ya dices? -Le pregunto Cristina

- Buenos días. -Le contesto Jane sin levantar la mirada

- Hija, como ayer no comiste nada, te traje esta jugo que te va a mantener hidratada por el día. No queremos que te desmayes o algo así en la escuela. -Le dijo José dándole la bebida

- ¿Desde cuando se preocupan por mi? -Les pregunto Jane aceptando la bebida con algo de duda

- Siempre, siempre nos preocupamos por ti. -Le contesto José sonriendo

- Mas les vale que esto no tenga nada raro, porque si no, no los voy a perdonar por el resto de mi vida. Bueno, me voy a la escuela. -Le dijo Jane tomando las llaves de su carro

- ¿No vas a comer? -Le pregunto Cristina

- No, tengo la bebida así que tomare eso. -Le contesto Jane saliendo de la casa

Jane se subió al carro, y dio un suspiro. Miro la bebida que sus padres le habían dado, y en cierto punto la puso feliz. Pensaba que la regañarían, y el hecho que le dieran algo para su salud le resulto bonito. Aunque, aun seguía enojada con ellos.

La chica se dirigió a la escuela. Iba tomando de la bebida, y aunque no sabía tan bien, sabia que la tenía que tomar por su salud.

Una vez llego a la escuela, se bajo del carro y se dirigió a su casillero. Empezó a guardar unos libros cuando vio que un chico puso su mano en el casillero del lado, bloqueando a Jane de poder irse.

- ¿Ander? De todos los chicos de esta escuela, ¿el? -Le pregunto el chico

- Si, Ander. ¿Tienes algún problema? -Le pregunto Jane dándose la vuelta, quedando de frente a Guzmán

- El es mi amigo, de los mas cercanos. -Le contesto Guzmán

- El no dice lo mismo. Después de Marina, el piensa que tu lo dejaste a el y a Polo de lado para estar de fiesta en fiesta con Valerio. Eso, no es una amistad. -Le dijo Jane

- No puedo creerlo. Primero hablas con Samuel, y ahora te andas besando con Ander. -Dijo Guzmán llevando su mano a la frente

- Guzmán, ¡madura de una puta vez, carajo! Ya no estamos en primer grado. Tienes que entender que no puedes controlar a todo el mundo. Pareces un niño intentando controlar a la escuela. -Le contesto Jane

- No es eso Jane, me e quedado solo de la noche a la mañana. Las personas que yo pensaban que eran mis amigos, me han abandonado. -Le dijo Guzmán

- El papel de victima no te queda, tu te buscaste eso. Comenzando conmigo, con Ander, con Polo y con cualquiera que intentaste manipular. -Le contesto Jane

- Sabes, en algo estoy de acuerdo contigo. Sería mejor que algunas personas desaparecieran de esta escuela. -Le dijo Guzmán poniéndose de frente a Jane

- Que lastima que no es así de fácil. -Le contesto Jane sonriendo

- No vales la pena. -Le dijo Guzmán comenzando a alejarse de Jane

- Guzmán. -Llamo Jane

- ¿Que quieres? -Le pregunto Guzmán

- No vuelvas a ponerte en el papel de victima, por favor. Por una vez en tu puta existencia, hazme caso. -Le contesto Jane mientras le daba una palmada en la espalda

Jane entro a la clase. Antonio entro al salón y se dirigió rápidamente a Jane. La chica le explico que Ander no vendría a clase hoy, así que el se podía sentar ahí.

Las clases se les hacían eternas sin Ander, no tenia a quien molestar. Las clases siguieron su curso normal, y en todas las clases Jane tomaba del jugo que le dieron sus padres.

Una vez las clases terminaron, Jane se dirigió a su casillero para guardar unos libros que no necesitaba. También, noto que le faltaba poco para terminar la bebida. Así que procedió a beber hasta la ultima gota de la misma.

Guardo sus cosas y decidió irse a la biblioteca, la cual estaba lejos. Mientras caminaba, se empezo a sentir mareada. Sintió un dolor horrible de cabeza y su visión se empezaba a deteriorar.

Su caminar se hacia mas tonto y débil. Hasta que llego un momento en el que dio un paso en falso, y su cuerpo conoció al suelo.