- ¡Sucio! ¡Suéltame, hijo de puta! -Le grito Jane entre lagrimas
- Ay tranquila, ya te acostumbraras en dos meses. -Le contesto Francis acariciando las mejillas de Jane
- ¡No me toques! -Le grito Jane moviendo su cara rápidamente
- ¡Ey! No me faltes el respeto, digo, si sabes lo que te conviene. -Le contesto Francis tomando con fuerza el cuello de Jane
- Sucio, asqueroso de mierda. -Le dijo Jane aun entre lagrimas
- ¡Cállate! -Le ordeno Francis dándole una cachetada a Jane
- No sabes cuanto te odio. -Le dijo Jane
- Y yo lo tengo muy claro pero mientras me sigan pagando, lo seguiré haciendo. -Le contesto Francis
- Cabrón. -Le dijo Jane
- Ya veras como en dos meses te la estarás pasando mejor. -Le contesto Francis
- En dos meses, espero estar muerta. -Le dijo Jane
Francis procedió a terminar de ponerle las cadenas a Jane, y a recoger sus cosas. Aunque la mayoría del tiempo estuvo diciéndole un montón de cosas a Jane. De las cuales casi todas no tenían sentido para ella.
Jane estaba muchísimo peor que hace unos días. Ya son casi dos semanas de que esta secuestrada. Ya casi era imposible reconocerla de tantos golpes que a recibido, su rostro estaba perdido entre sangre y moretones.
En un momento a otro, Jorge entro al cuarto. Jane automáticamente pensó que era el turno de el para hacerle daño. Pero se llevo una sorpresa cuando el, junto a Francis, la sentaron en la silla solamente.
Comenzó a escuchar unos pasos. Sospechaba que seria Teodoro, quien la visitaba cada cuatro días. Teodoro entro al cuarto junto a su compañero. Este venia con un con un cuerpo en sus manos. El hombre entro, y tiro ese cuerpo al suelo. Dejando ver la cara del cuerpo.
- ¡Carlos! -Grito Jane comenzando a llorar
- Esto es lo que pasa cuando me traicionan. -Dijo Teodoro señalando el cuerpo de Carlos
- ¿Esta... muerto? -Le pregunto Jane
- Casi, no quise matarlo sin que tu estuvieses aquí. -Le contesto Teodoro
- Carlos, perdóname. No tenias que morir así, todo fue mi culpa. -Dijo Jane mirando el cuerpo de Carlos
- Ey, tranquila. Solo, procura salir de aquí. -Le contesto Carlos
- Eras muy joven, Carlos. Tenias una vida por delante, y la tiraste a la basura por intentar salvar a Jane. -Dijo Teodoro agachándose detrás de el
- Teodoro, no lo hagas. El no se merece eso. -Le pidió Jane entre lagrimas
- Fue totalmente la culpa de el, por andar jugando a los superheroes. Acaben con esto de una vez. -Pidió Teodoro levantándose
Teodoro miro a Jorge, y luego salió del cuarto. Jorge tomo su pistola y le disparo así, a sangre fría. En el momento que Jane escucho el disparo, comenzó a llorar lo que nunca habia llorado en su vida.
Los hombres se fueron, y dejaron el cuerpo de Carlos en el piso frente a ella. El cuerpo comenzaba a desangrándose frente a Jane. La chica solo lloraba mientras miraba el cuerpo de Carlos, sentía una culpa inmensa.
Eventualmente, los hombres sacaron el cuerpo de Carlos. Dejando a Jane preguntándose donde tirarían el cuerpo. Desde la ultima vez que vio a Carlos, o sea hace cinco días, no a comido nada. Aunque, sabia que ahora con la muerte repentina de Carlos, no volvería a comer en bastante tiempo.
Jane simplemente no podía mas, su cuerpo ya estaba cansado. Había tenido mas de veinte violaciones en una semana y media. Algunas veces perdía las esperanzas en el que la salvarían, era difícil no hacerlo después de todo lo que le esta pasando.
Tenía miedo, demasiado. Pensaba en que esos hombres que la están violando, pudieran estar llenos de enfermedades. Algunas veces dudaba si se protegían para evitar que ella se embarazara. Aunque después que terminaban de violar, le daban una pastilla. No sabia si quiera si eso le estaba funcionando.
No tanto porque la pastilla no funcionara, si no porque no estaban teniendo una buena higiene con ella. Aunque era de esperarse, pues sabia en las condiciones que estaba. Ni si quiera le han limpiaban bien sus heridas.
La chica se quedo mirando su entrepierna. Toda esa área la tenia llena de sangre, o llena de moretones. Le dolía mucho esa zona, y mas todavía teniéndola sentada en esa silla de madera. Lo mas que quería era de acostarse en el suelo, aunque ese estuviera duro.
Jane se encontraba entre dormida y despierta. Estaba muy cansada, pero todo lo que pasaba a su alrededor no la dejaba dormir. Unos pasos comenzaron a escucharse desde afuera del cuarto, quitandole por completo el sueño que tenía.
Las puertas se abrieron, y en eso se vio una silueta de una chica. Al entrar al cuarto se dejo ver el rostro, era Carla.
- Te traje comida, y agua. -Le dijo Carla enseñando la comida
- No quiero nada de ti. -Le contesto Jane evitando mirar la comida
- No has comido desde hace cinco días, come. -Le dijo Carla
- Gracias. -Le contesto Jane tomando el plato de sopa
- Sabes, no quería que te hicieran tanto daño. Solo quería evitar que lo dijeras. -Le dijo Carla
- Que considerada. -Le contesto Jane algo sarcástica
- Hablo en serio. -Le dijo Carla dándole el vaso de agua
- Si tu lo dices. -Le contesto Jane
Carla se levanto y comenzó a observar a Jane. Sentía pena al ver lo destrozada que se veía Jane, pero eso no significaba que la sacaría de ahí. Después de todo, ella sabia el secreto y era peligroso tenerla fuera. Por ahora al menos.
- ¿Como esta Ander? -Pregunto Jane terminando de comer
- Mal. No a dormido nada, y sus notas han bajado muchísimo. -Le contesto Carla
- Carla, tienes que decirle el código. No quiero que siga sufriendo, por favor. -Le pidió Jane
- No puedo, le prometí a mi padre que no diría nada. Y lo voy a cumplir. -Le contesto Carla
- Y si Samuel estuviera en mi posición, ¿Dejarías que lo maltratasen sabiendo que lo puedes evitar? -Le pregunto Jane
- El no significa nada para mi. -Le contesto Carla
- El me dijo otra cosa. -Le dijo Jane
- Jane, tu manipulación no va a hacer que abra la boca. ¿Por mi? No van a conseguir el código. -Le contesto Carla para dirigirse a la salida de la puerta
- Hija de puta. -Dijo Jane para ver como las puertas se cerraban
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LIES | ÉLITE
Fanfic── LIES | ÉLITE "Ella se prometió a si misma, que nunca permitiría ser objeto de nadie más. Había aprendido su lección, nadie mas podría hacerla sentir menos. O eso pensaba ella, cuando todo en su vida explota, y se entera de misterios, solo vuelve...