cena con los Payne.

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La mañana siguiente después de desayunar fui a cortar un poco de leña, ya que la usaríamos para la cena que organizaría la familia Payne esa noche. Iban a asistir gran parte de las familias con más dinero del pueblo por lo que mis padres querían lucir lo más presentables posibles. Sería una cena elegante y se llevaría a cabo un baile, por lo que todos debían de llevar a un acompañante. Yo estaba muerto de nervios practicando pasos de danza, tú estarías ahí, así que quería impresionarte.

—Cariño, no es así. Dejarás asustada a la chica-. escuché decir a mi madre y me puse rojo de la verguenza. ¿Cuánto tiempo llevará espiándome? me pregunté.

—Entonces... ¿cómo se hace?-. susurré con toda la pena del mundo.

—Oh mi pequeño Harry, ya estás creciendo-. me dijo despeinándome el cabello al mismo tiempo que me lanzaba una mirada llena de amor. —Tus manos van en la cintura de la chica y ella pondrá sus manos en tus hombros-. me explicó.

—¿Crees que podrías enseñarme?-. pregunté pensando en que me diría que era fácil y que sólo era cuestión de perder el miedo, pero en cambio me sonrió como nunca antes me había sonreído y empezó a tararear su melodía favorita.

Unos minutos después terminamos de ensayar y yo estaba satisfecho pues al menos me habían salido unos cuantos pasos, ya no estaba tan perdido.

Más tarde me encontraba con mi traje puesto, me sentía como un guardaespaldas de los que trabajaban para la realeza.

—Gemma, el hijo de los Cooper nos mandó a decir que si podía escoltarte al baile y le dije que sí-. dijo mi madre y vi como Gemma soltó una sonrisa radiante.

—¿Daniel Cooper me invitó al baile?-. gritó emocionada y yo solo rodé los ojos.

—Así es, espero que sepas danzar porque a Harry le acabo...

—¡Madre!-. grité avergonzado.

—Cariño, no es algo por lo que debas avergonzarte...-. dijo mi madre y Gemma no paraba de burlarse de mí.

—¿Y con quién presumirás tus poderosos pasos de baile, galán?-. preguntó mi hermana con un tono burlón.

Pero antes de que pudiera contestarle mi madre dijo
—Los presumirá con la hija de los Cooper.

Me quedé pasmado sin saber qué decir o qué hacer.

—Irás con Lily Cooper al baile, deberías de estar emocionado, bobo-. escuché decir a Gemma.

—Oh, eso es... genial...-. respondí tratando de parecer emocionado pero realmente no me causaba ni un poquito de emoción tener que escoltar a Lily Cooper al baile, y no porque ella no fuera bonita porque realmente su belleza era de la más envidiada del pueblo pero... yo solo quería escoltarte a ti, aunque eso fuera imposible.

[...]

Horas más tarde estábamos en la casa de los Payne.
Me encontraba en mi mesa, la cena ya había terminado y en unos minutos iniciaría el baile. En la mesa de a lado estaban los Cooper y Lily no paraba de sonreírme cada que volteaba mi vista hacia su mesa. No habíamos hablado pero sabia que lo haríamos en unos minutos y yo solo quería encontrarte, volteaba para todos lados pero no te miraba por ningún lado.

—¿Buscas a alguien?-. dijo una voz muy femenina a mi lado, era Lily y me estaba hablando a mí.

—No, mi lady, no busco a nadie-. respondí dudoso levantándome de mi asiento para hacer una reverencia a lo que ella imitó.

—¿Está ocupado?-. me preguntó mirando el asiento que estaba a lado de mí.

—Oh, claro que no, toma asiento-. dije al mismo tiempo que recorría la silla para ella.

—Que caballeroso eres, Harry.

—Sí, bueno... permítame comentarle que usted luce bellísima esta noche-. solté de pronto pero antes de que ella pudiera responderme apareciste tú, llevabas puesto un traje gris pegado al cuerpo con una corbata azul, y tu cabello estaba muy bien peinado, estabas guapísimo.

—Buenas noches, parece que la están pasando muy bien, ¿no es así, señor caballeroso?-. me preguntaste haciendo énfasis en la última palabra, tenías la mirada llena de celos y yo me estaba derritiendo. Sabías cómo jugar conmigo, sabías cómo ponerme nervioso.

—Sí, la estamos pasando genial, ¿y ustedes?-. respondió Lily y yo la voltée a ver, confundido. ¿ustedes? Por estar mirándote no me había dado cuenta que a lado de ti estaba una hermosa chica, no venías solo.

—Oh, pues nosotros también la estamos pasando genial, ¿cierto, Susan?-. le acariciaste la mejilla y me volteaste a ver, querías que sintiera celos, me querías provocar y definitivamente lo estabas logrando.

—Claro que sí, que la sigan pasando bien-. dijo la chica despidiéndose, se dieron media vuelta y se alejaron pero mi mirada se enfocó en tu mano, tenías tu mano en su cintura y yo me sentí morir.

[...]

El baile había comenzado y estaba danzando con Lily, y aunque estaba bailando con la chica más envidiada del pueblo yo no paraba de mirarte a ti, no paraba de mirar como es que danzabas con ella, la manera en que la sujetabas de la cintura, la manera en que ella te tocaba los hombros, la manera en que sus rodillas rozaban, la manera en que la mirabas, la manera en la que ella te miraba. Me estaba muriendo de celos.

—Harry, ¿estás bien?-. me preguntó Lily, sacándome de mi mente.

—Sí, estoy bien-. dije intentando no lucir triste y traté de concentrarme en ella. En sus rizos cafés que olían a flores y su vestido blanco. Y estaba enojado conmigo mismo porque Lily era hermosa, tenía todo lo que en una mujer se consideraba deseado, pero ella no eras tú.

A pesar de que frente a mí estaban unos rizos perfectos con olor a rosas, yo seguía extrañando tus cabellos despeinados con olor a vainilla, a pesar de que frente a mí estaba la sonrisa más femenina, yo seguía extrañando las líneas que se forman cada que sonríes.

—Señor Styles, no tiene que danzar conmigo si no lo desea...-. me susurró.

—No, no. Si quiero hacerlo, si quiero bailar con usted, mi lady-. respondí y ella simplemente me sonrió.

—No sabía que fueras tan tímido... me pareces muy tierno-. por alguna extraña razón me sonrojé, no supe que responderle así que le besé la mejilla.

Recuerdo que nos miramos por varios segundos sin saber qué decir, solo estábamos sonrojados y nerviosos, y de pronto sentí una mano detrás de mí.

—Harry, te buscan.
























Larry Stylinson.

¿Morirías por mí? Donde viven las historias. Descúbrelo ahora