𝐒𝐓𝐀𝐘 𝐆𝐎𝐋𝐃 | 𝗬𝗼o𝗻𝘀𝗲𝗼𝗸

uno

Las puertas del la nueva escuela se veían aterradoras para Hoseok. Sentía muchas miradas sobre él, podía sentir la curiosidad de los estudiantes por averiguar cosas sobre el.

Jung Hoseok no era malo haciendo amistades, pero le causaba cierto temor no ser aceptado por las personas nuevas. Se escuchaban pisadas desde el otro lado de los pasillos, ahí venía la directora hacía donde estaba, decidió caminar un poco más hasta quedar frente a frente con la señora.

— Buenos días, Joven Jung. — saludó la dirección con una enorme sonrisa, algunas arrugas se asomaban por el área externa de sus ojos, sus mejillas chocaban con el final de su pequeña y redonda nariz, era un poco tierna para la vista de Hoseok. — Espero que te sientas cómodo aquí. Tu salón es el 3B, puedes pasar más tarde por mi oficina para ver tus demás documentos.

— Claro que sí, no hay problema. — Contestó Hoseok con algo de nervios. Vió como el robusto cuerpo de la directora de movía hasta perderse entre los pasillos hasta que recordó no saber dónde quedaba su salón.

Suspiró y dió vuelta para ir a llamar a la directora pero, una silueta caminaba lentamente en sentido contrario de como estaba el. Paró su caminar un momento y miró al chico.

No era más alto que el, caminaba encorvado y con la cabeza mirando al suelo, la capucha de su abrigo cubría su cabello y parte de su cara pero eso no hacía pasar desapercibido el color rubio desgastado. Jung no podía explicar correctamente el color del cabello del chico, pero era una mezcla entre el plateado y un rubio, o eso pensaba.

— Oye. — No tenía más opción que pedirle ayuda al chico, lentamente el de pelo plateado subió la cabeza hasta encontrarse con la anatomía de Hoseok. — ¿Sabes dónde queda el salón de 3B?

Yoongi continúo vagando su mirada por Jung, los pequeños y tristes ojos de Min Yoongi estaban mirando a Hoseok con atención.