Amor en la Cocina

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Luego de practicar mi hermano decidió dejarme en mi apartamento mientras salía con su novia.

Cuando estuve sola me duche y me arregle para estar en la casa, pero un golpe en mi puerta me asusto.

Fui a ver quien era y automáticamente mi piel se erizo en un segundo.

-Russo tengo que mostrarte algo- hablo el chico que me había secuestrado

-Apellido odio llamarte por secuestrador- dije mientras me colocaba unos tenis

-García- comento serio

Tenía un tipo de ropa deportiva, pero bastante cómoda para estar en mi casa.

Él no me dejo terminar de ponerme bien mis tenis y me saco a empujones

-No tenemos tiempo- se defendió mientras me empujaba dentro del elevador

Cuando llegamos al subterráneo el me subió a su motora y arranco en segundos.

Conducía como un desquiciado haciendo que literalmente me pegara a su cuerpo.

No podía ver muy bien por el golpe del aire en mi cara.

Solo sentía como esquivaba los autos de una manera desenfrenada.

- ¡Conduce más despacio! - grite, pero no me escucho

Se detuvo frente a la gran mansión en donde estuve varios días.

-No- dije asustada

-Tranquila solo necesito colocarte equipo de protección- menciono mientras entraba rápidamente

Al salir solo me dió un navaja.

-Esto es el método de protección- lo mire incrédula

- ¿No hay chaleco antibalas? - pregunte

-No aquí pondremos a prueba tu estado- comento subiéndose a la motora y lo seguí

Una vez más condujo como loco.

Luego de unas horas se estaciono frente a una gran casa.

- ¿Y esto? – pregunte mirando todo

-Marcus, ahora sígueme- hablo corriendo a la parte de atrás

Como si conociera todo logro abrir la puerta de atrás y entramos.

-Te mostrare algo, pero debe ser rápido- dijo mientras tomaba mi mano

Subimos corriendo a una habitación, al entrar todo estaba negro.

Cuando encendió la luz ahí había demasiadas fotos de mi.

Sentía un dolor en mi corazón notando todo lo que había ahí.

-No toques nada- susurro García

Había fotos mías en la universidad, en la fiesta en donde lo conocí, en el complejo cuando sali, fotos de la actualidad e incluso de mis viajes.

-Ya tenemos que irnos- me tomo de mi mano sacándome de ahí a fuerzas

Me sentía paralizada no podía asimilar todo lo que había visto.

García me ayudo a subirme en su motora y arranco mientras me aguantaba.

Él se detuvo en un parque lejos.

-Asimílalo todo- me miro serio

-Es difícil- dije sincera

-El planeo todo con anticipación- comento sonriendo