La complicidad de nuestras miradas

Parte 1

Eramos personas desconocidas al comienzo, ninguno de los dos sabia de la existencia del otro pero una vez algo en el curso en el que estábamos nos unió y así comenzó una historia el cual ninguno esperaba que tomara un rumbo tan distinto hasta el día de hoy.

Empezamos con una simple respuesta de un captura de pantalla sobre un estado que había publicado a las pocas horas estamos bromeando como si nos conociéramos desde siempre y de un momento a otro contamos un poco de nuestras vidas, todo iba fluyendo poco a poco sin esperarnos que esa primera conversación en la madrugada se volviera nuestra rutina por tantos días.

Siempre teníamos algo nuevo del porque hablar ya sea una situación que estuviera pasando el o yo, y transcurrieron las primeras risas, la sensación de alegría, el tonto suspiro que provocaba un mensaje.

Luego llego el momento de hablar en persona ya lo habíamos hecho pero esta vez ya con complicidad sabíamos de lo que hablamos con tan solo una mirada las personas de nuestro alrededor nos tachaban de locos y que algo escondíamos pero no, no era así en ese momento ninguno de los dos estábamos claro que era ese "ALGO" se formo con los días tras nuevas conversaciones por las madrugadas y esos desvelos hasta muy altas horas de la noche es que mis mejores conversaciones eran por la madrugada el silencio que provocaba todo era sensacional de sentirse completa al contarle a alguien nuevo todos los sueños de aspiraba lograr.

Era el hecho que no le molestaba que tan emocionada era al contar todo o mis arranque de locuras cuando algo no me agradaba e inclusive se alegraba de cada pequeño paso que yo daba y el interés con el cual me hablaba.