Capítulo 4→Soy Lydia Martin

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»Stiles«

Es viernes, han pasado tres días los cuales Scott no ha dejado de insistir para que valla a la bendita fiesta. Al principio me negué, obviamente, pero talvez sólo talvez, pueda ver a la chica, y antes de que piensen “Que locura” o “Enserio crees que irá a esa fiesta” sí, y sí, es una gran fiesta, Scott me dijo que irá gente de nuestra preparatoria y de la de paga del pueblo, dónde supongo está ella.

Son las 5:00 de la tarde, hoy no tuve turno en el super así que después de la escuela me dediqué a hacer tareas y recoger un poco mi habitación. Intenté llamar a mi padre, para avisarle acerca de la fiesta pero no respondió, pensé en llamar a la comisaría, pero seguramente se molestaría.

Después de un rato decidí darme una ducha y justo cuando salí me llegó un mensaje.

Scotty
Hey, ¿Nos iremos
en el Jeep?

Sip, o ¿Tienes otra
idea? Talvez en tu
bicicleta.

Scotty
Ja-Ja-Ja
¿Pasas por mi
a las 8:00?

Si, pero se puntual,
por favor.

Después de ponerme mi típico atuendo, lavarme los dientes y intentar hacer algo con mi cabello; bajé al primer piso busqué mis llaves y salí a la casa de Scott.

El camino se fue muy rápido, al llegar me bajé y toqué la puerta, tenía una llave, pero creo que es más cordial si toco.

–Stiles, cariño ¿Vienes por Scott–
La mamá de Scott me abrió y me dió un cálido abrazo.

–Síp, dígame qué ya está listo por favor– Soltó una pequeña risa y dijo.

–Supongo que sí– Fue por un bolso y siguió. –Yo ya me voy, tengo doble turno, por favor cierren con llave, me despides de Scott– Me dió un beso en la frente y salió de la casa.

–¡SCOTT!– Subí las escaleras mientras gritaba.

–Ya, ya estoy listo– Salió de su habitación. –Son las 8:03 llegaste tarde–

–De hecho, llegué hace unos minutos, pero me quedé hablando con Melissa– Le dí una sonrisa satisfactoria. –Que por ciento ya se fue–

–Perfecto, ¿Nos vamos?– Sólo asentí. –No te he preguntado del  porque tu repentino interés por la fiesta– Mencionó mientras cerraba la puerta.

–Claro, que lo sabes– me subí al Jeep y espere a que Scott hiciera lo mismo, una vez que estuvo adentro, seguí. –Sólo quieres que me humille– Scott empezó a reír y asumí que en efecto, lo sabía

Estuve alrededor de 20 minutos manejando, al llegar, a simple vista se podía apreciar lo grande y ruidosa que era. Justo en ese momento recordé porque no me gustan las fiestas.

•••

»Lydia«

Eran alrededor de las 8:30 y la casa ya estaba llena, mi mamá se había ido de fin de semana con mi hermana y su bendición, lo que significaba CASA PARA MÍ SOLA o FIESTA EN CASA DE LYDIA.

¿Amor? -Stydia Donde viven las historias. Descúbrelo ahora