Serie de mini-historias de Sakura con motivo al evento #MultiSakuMonth2020

NejiSaku. Haruno.

Sus besos, sus caricias, todo de ella, lo hacía olvidar la cruda realidad.

Hacerla su mujer y dejar en claro que son uno, es todo para él.

No quería aceptar el hecho de separarse de ella para casarse con alguna mujer de su clan. No lo aceptaba.

—Te lo he propuesto muchas veces Neji. —exclama Sakura acurrucándose en el pecho del joven. —Conviértete en un Haruno.

La primera vez que Sakura se lo propuso, pensó que era una broma. Aunque su mujer se lo aclaró finalmente, con dejar de ser un Hyuga, se libraría de sus deberes con el clan.

—No es tan fácil, Sakura. —contesta Neji. —El clan se vengaría de una forma de nosotros, más con este maldito sello. —la mano del joven toca su frente desnuda. —Si tan solo...

—Kakashi-sensei nos puede ayudar. —interrumpe Sakura. —Él es el Hokage, además soy un buen partido. —comenta besando a Neji.

El nombre de Sakura Haruno es muy famoso en el sector médico, la mejor ninja médico del país del fuego.

Muchas aldeas quisieran tenerla en su base shinobi.

—Ellos aceptaran nuestro matrimonio si lo cambio por mis servicios médicos.

—¿Quieres ser el ninja medico principal del clan Hyuga? —cuestiona el joven asombrado.

—Es una forma de que acepten nuestra relación. —suspira Sakura. —O sino, tendré que secuestrarte y hacerte mi esposo.

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Aún seguía pensando en la propuesta de su novia.

Ser un Hyuga es un honor pero eso lo alejaba de su felicidad.

Su relación con Sakura comenzó, cuando lo ayudó a recuperarse luego de revivirlo en la guerra shinobi.

Al decir revivirlo, fue una suerte que Tsunade llegara cuando esas crestas de madera le perforaron su vientre.

Los sellos yin que posee el Byakugo no jutsu son poderosos, más cuando dos de ellos trabajan en conjunto.

Sakura junto con el personal médico, lo llevaron de regreso a uno de sus puestos. Dejando a los demás Shinobis luchar contra Madara y Obito Uchiha.

Cuando despertó, su cuerpo estaba conectado de muchos tubos y cables. Estaba vivo y en Konoha.

—¡Neji! —esa voz solo era de Sakura Haruno.

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—Aquí está el informe Hokage-sama. —exalta Sakura alegre. Sai solo sonríe.

—Parece ser que en tu día libre lo gozaste al máximo. —comenta Sai, alarmando a Sakura.

—Imbécil. —espeta Sakura molesta y sonrojada. —No te metas en mis asuntos.

—Ah, nos estas confirmando que tuviste un encuentro sexual. —menciona sin pena el joven.

—Sai. —los puños de la joven se preparan para ser usados. —¿Quieres callarte?