Es real

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Zhan estaba ahí, de pie, todos lo miraban, Yibo estaba de rodillas frente a él, el anillo reluciente en su caja, ¿Era un maldito sueño o algo así?

-Xiao Zhan, no tengo duda alguna, ¿Quieres casarte conmigo?-

-Yo...- sus ojos recorrieron todo el lugar los señores Wang parecían tan felices, en una esquina, su ex, miro a Yibo, solo pudo asentir, no había palabras que quisieran o pudieran salir de su boca.

El mes había pasado volando, se había mudado a un piso más económico, sin su novio y sus aires de estrella no debía vivir en un lugar tan costoso, le sorprendió la cantidad de dinero que podía guardar, dejo el trabajo nocturno y trabajo en una cafetería, por la noche estudiaba en la escuela nocturna era tan fácil, su vida parecía mucho más relajada.

Yibo lo llevaba de vez en cuando de paseo o a comer, en esos momentos solo disfrutaba, no era que quisiera una nueva relación y Yibo era un buen amigo, hasta ahora, había olvidado que se casarían.

El anillo en su dedo le gritaba que era real, está era su realidad, era un anillo de plata, una pequeña turquesa brillaba en el medio, los gritos de todos y los aplausos lo aturdieron, más cuando su prometido lo beso. No había besado nunca a nadie, su relación anterior era más bien infantil, Yibo se tomó las libertades que quiso, lo tomo de la cintura, besando con desesperación, el beso lo dejo sin aliento.

-Lo siento, mi prometido es tímido-

Excuso Yibo, lo tomo de la mano para recibir las felicitaciones, sus padres estaban muy felices, Zhan estaba mareado.

-Yibo... Necesito aire...-

-¿Estás bien hijo?, Luces pálido...- el señor Wang lo tomo del hombro, Yibo tocó su frente, no tenía fiebre.

-Quizas solo la emoción, lo llevaré a descansar padre...-

-Cuidalo Yibo, no quiero que quedes viudo antes de casarte hijo...-

-Si madre-

Yibo cargo con facilidad a Zhan, llevándolo a una habitación de la casa, lo recosto en la cama.

-Zhan, cálmate, ¿Que paso?-

-Nos vamos a casar...-

-Pues si, nos vamos a casar, ese es el trato...-

-Seremos esposos...-

-Si, por un año...-

-entonces, yo... Yo debo...-

-¿Que cosa?-

-cumplir los deberes de una esposa...-

-¿Deberes?- Yibo lo pensó un momento, si, se casarían, vivirían juntos y los esposos tienen intimidad... Eso parecía asustar a su esposo.

-Calma Zhan, no pasará nada que no quieras, no te obligare, eso no es parte del contrato... Ahora bien, si tu quieres...- miro al chico aturdido en la cama, reconocía que era lindo, una cara linda. Su vista fue bajando, era delgado, piernas largas, cintura breve, buen tracero, totalmente su tipo, se acercó, Zhan retrocedio, temblaba, eso lo hacía aún más tierno.

Zhan siguió la mirada de Yibo, algo no estaba bien, cuando se acercó solo pudo retroceder, Yibo subió a la cama, Zhan pego su espalda contra el respaldo de la cama, Yibo lo atrapó por la cintura, Zhan empujó con sus brazos, sin éxito, sus labios se unieron en un beso, de nuevo. Pero está vez era lento, muy lento, su mente se puso en blanco, cerró los ojos, disfrutando del beso.

-ejem... Hijo, solo quería saber si Zhan estaba bien, pero por lo que veo ya te ocupas de el...-

Era la voz de la señora Wang, Zhan empujó a Yibo y se bajó de la cama, arreglando su cabello, Yibo se quedó en la cama, frustrado, quería comer conejo

-Madre...-

-Perdón por arruinarte el momento hijo, pero hay invitados... Zhan, vamos, te presentaré a las amigas, y Yibo, será mejor te des un baño helado...-

Apenas la puerta se cerró Yibo vio lo que su madre, se cubrió con la almohada, solo había Sido un beso, un beso, no era la gran cosa, aún así su amigo había despertado.

-Joder, y yo que le dije que no era necesario.... Ha maldita sea....-

Zhan regreso a la fiesta, la mayoría de personas eran desconocidas para el, muchas de las chicas lo miraban con recelo, así como unos cuantos donceles, eran todos atractivos y al parecer a ninguno le gustaba su relación con Yibo.

-Cuentanos Zhan, ¿Cómo es que atrapaste a un soltero como Yibo?, Nunca se comprometió antes, ¿Cuál es el secreto?-

Zhan sabía que ellas solo preguntaban por joder la vida, la señora Wang estaba por responder cuando el se adelantó.

-fue muy fácil a decir verdad, solo no parecía desesperado por casarme con él, citas breves y escasas, lo hicieron querer monopolizar mi tiempo, y aquí está, un anillo, que puedo decir, a Yibo le gustan los retos, creo que yo lo fui...- sin más se alejo de ese grupo, prefería al señor Wang y los hombres mayores que hablaban de cosas serias y no solo bobadas.

- Zhan, hijo, ven, ¿Cómo van los estudios?-

-Señor Wang, bien, supongo, tome el taller de diseño de interiores que recomendó, es fascinante todo lo que se puede hacer...-

-Que suerte tienes, tu yerno es decorador, bastante apropiado para un arquitecto-

-ho, no, Zhan es artista, la decoración es solo un pasatiempo, deben ver sus cuadros, son hermosos-

Una mano se poso en su hombro, un hombre joven lo miraba.

-Que belleza, debo conocerte, ¿Como te llamas?-

-ho, Carl, ni lo intentes, es mi futuro yerno, Xiao Zhan, Zhan esté es Carl, un chico de los ángeles, vino por unas prácticas, es muy atrevido-

-un gusto-

-para mi es un placer, bello bombón-

Zhan se comenzó a sentir incómodo, el señor Wang lo noto, pero ese joven no quería soltar a Zhan.

-Mi amor, aquí estás, vamos a bailar, ¿Me permite?- Yibo recién bañado y arreglado tono la mano de su prometido llevándolo a la pista.

-¿Que pasaba ahí?-

-Ese hombre no me soltaba, tu padre intento ayudar, pero lo mando a dónde los viejos...-

-no puedo creerlo, me eres infiel, se que te sobra belleza, pero no me lastimes-

-Idiota-, no fue así... Él se me acercó-

-Lo se, lo ví desde arriba, pero no parecía resistirte-

-Es amigo de tu familia, no quería ser grosero-

-Bien, lo pasaré por alto, si me besas-

-¿Que?-

-vamos conejito, así quedaría claro que posición hay en esta fiesta...-

-Bi... Bien-

Zhan acercó su cara a Yibo, mientras se mesian al compás de la música, sus brazos lo ayudaron a sostenerse, solo fue un roce, un pequeño beso. Yibo no se conformo con ello, apretando a cabeza de Zhan y empujándolo más cerca, el movimiento asusto a Zhan, quien soltó un grito, grito ahogado por la boca de Yibo, su lengua recorrió cada lugar dentro de la boca ajena. Zhan apenas podía sostenerse del pecho de Yibo.

El beso termino al igual que la música. Zhan seguía aturdido, se casaría con ese hombre, era real, le había prometido no hacer nada, pero tal parecía que esa promesa no se cumpliría, después de todo, eran o mejor dicho, serían esposos por todo un año.

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