Dos.

Abandono.

Sangra, explota, llora y late. Y se da cuenta que de a poco el dolor se apoderó de todo el lugar, afuera, adentro y en algún lugar donde quiera que este el pedazo de alma que se había ido con él.

Ahora eran dos, no los dos que ella se había encargado de soñar muchas noches, otros dos, los hermanos. Solos.

Y no sabía si era por el frío de ese bosque, o por la manera de apretar a su varita pero ya no sentía la mano y no le importaba. No sentía varias cosas desde hacia unos días, o meses tal vez. El tiempo era algo sin valor en ese momento, cuando el pasado se doblaba sobre el presente y hacía del futuro algo distante y absurdo. Cuando el futuro ya no existe, por lo menos no su futuro.

Y suplica, suplica, le ordena que vuelva, le grita mientras alrededor todo duele, y en su pecho ahora ya nada ruge, si no que en cambio todo ronronea débilmente, latiendo cada vez con menos fuerza y sangrando. Y lo odia, por primera vez lo odia, desea no haberlo conocido, desea no haber creído ni una sola de sus mentiras, desea no haberlo mirado ese día en el tren cuando tan solo era un niño con la nariz sucia, desea que desaparezca de su mente, porque ahora todo es demasiado frío y siente sus ojos azules todavía dentro de ella.

I think it's time; we give it up and figure out what's stopping us, from breathing easy and talking straight.

La lluvia cae cada vez más fuerte y pesada, sigue produciendo los mismos ruidos a través de la oscuridad y el viento se confunde con la voz de Harry que se encuentra en algún lugar dentro de esa carpa con olor a sopa y a gatos viejos. Y no entiende qué es lo que le quiere decir, tal vez que entre, ahora que la tormenta se ha vuelto frenética, tal vez que deje de llorar - que ya fue suficiente -  o tal vez habla solo como casi siempre en estos últimos meses .

De una manera increíble se siente más sola que antes, más sola que nunca en su vida, más sola incluso, que cuando tuvo que lanzarle un Obliviate  a sus padres.

La mitad que había elegido ya no estaba y le había dejado a ese maldito corazón tan destrozado que ya ni siquiera podía pensar racionalmente mientras seguía estirando los brazos, en un inútil intento de encontrar algo en el aire vacío delante de ella. 

- ¡Se ha i-i-ido! ¡Se ha desaparecido! – dijo entrando a la carpa tratando de comerse a bocanadas todo ese dolor, se tiró en un silla, se encogió en una manera inútil de protegerse y dejó que el nudo en su garganta se deshiciera un poquito, pensando que esta vez podría controlar al torrente de lágrimas. Grave error. Una vez que empezó fui difícil calmarse, los espasmos que recorrían su cuerpo se hacían más pronunciados. Harry le arrojó una manta encima - la manta de la litera de Ron- y al sentirse tan invadida por su perfume, notó que algo estaba totalmente roto. Verdaderamente astillado en mil pedazos, que ahora ella no podía ni quería juntar.

Ya no temía que el mundo mágico explote, porque realmente el mundo que conocía acababa de desaparecer. 

The way is clear if you're ready now, the volunteer is slowing down, and taking time to save himself;

"No es el momento Hermione, ¡que están por matarnos niña tonta!"- pensó luego de permanecer en la misma posición por lo que creyó horas, así que se paró y mantuvo la cabeza erguida, hasta que se dio cuenta de que era inútil fingir, nadie presenciaba aquel pequeño teatro que ella estaba intentando montar, nadie estaba admirando la perfecta imitación de una chica fría, a la que solo le molestaba un poco... bueno bastante, la huida de su mejor amigo.

 JÁ mejor amigo. 

Harry había decidido que ya era suficiente por hoy y estaba tirado en su litera con la cabeza bajo la almohada, como queriéndose ahogarse o fundirse con las mantas. Entonces vio que lo que quedaba de la búsqueda se iba a hacer muy largo, iban a llegar días de más de veinticuatro horas para ellos.

The little cracks they escalated, before we knew it was too late, for making circles and telling lies.

Como en un acuerdo tácito, ella y Harry no lo habían nombrado más, había desaparecido simplemente, había sido arrancado de esa historia, como si nunca hubiera existido siquiera. Al parecer siempre habían sido dos, el dúo de oro, los mejores amigos que habían estado juntos en los  tiempos de Hogwarts y ahora estaban más juntos en estos extraños tiempos de guerra.

Su mente todavía muy confundida buscaba convencerse de que el terrible dolor era, tan solo, por la traición a su amistad. Seguía repitiendo que era un cobarde, un mal Gryffindor, que había decidido volver corriendo a su casa en el primer momento en el que ella le había realmente rogado que se quedara, que la ayudara, que no la dejara sola. 

Él no debió venir, no debió existir nunca,ni ahora, ni antes, ni después.

En algunos momentos pensaba, que si tenían suerte y sobrevivían, él sería recordado solo como un compañero más de su época escolar, alguien que lamentablemente se había borrado y ya no existiría en un aparente futuro que jamás llegaría. Un futuro que se veía un poco más gris sin él, un poco más frío. Un mundo sin rojo, sin madriguera, sin ranas de chocolate y sin guardianes que se creen reyes. 

 Y comenzó a entender que el frío jamás se iría de allí, que ahora se quedaría instalado, entre ella y Harry, entre ella y su hermano, para siempre. 

You're moving too fast for me and I can't keep up with you; maybe if you'd slow down for me...

Cada vez que se movían de sitio, algo en ella le decía que dejara una pista, una simple huella que solo él entendería, algo para que pudiera regresar a salvarla. A salvarla de todo ese odio que se obligaba a tenerle para poder seguir adelante.Pero inmediatamente se castigaba mentalmente por las ideas tontas que formaba su adolescente sentimiento y se obligaba una y otra vez a enfocar sus ideas y toda su energía a las cosas importantes que sucedían allí.

Esa misma mañana habían decidido ir al Valle de Godric.

Y luego los todo sucedió muy rápido, una visita al cementerio, esos horribles villancicos que sonaban más y más fuertes, la casa de Harry y el encuentro con esa bruja vieja que los llevo engañados a su casa y el olor a rancio que invadía todo, Bathilda tenía a la serpiente dentro de ella y el caos y las explosiones se hicieron cada vez más fuertes.

I could see you're only telling lies, lies, lies, breaking us down with your lies, lies, lies; when will you learn?

Estaba amaneciendo, y Harry se removía ferozmente entre sueños pero todavía no despertaba, a su lado estaba la varita de acebo y fénix casi partida a la mitad. Y realmente, si algo le faltaba para desear abandonarse allí mismo era lastimar a uno de sus mejores amigos... a su mejor amigo – se corrigió mentalmente-.

Entonces después de días, largos días en los que ellos ya casi no reían, recordó a Ron, al pequeño Ron defendiéndola con una varita rota y pensó, mientras las lágrimas recorrían su rostro, que tal vez ese pequeño seguía allí en algún lugar y que no estaba todo tan perdido.

So plant the thought and watch it grow, wind it up and let it go.

Esa misma mañana Ronald también lloraba mientras seguía a esa bolita de luz pulsante y azulada que habia aparecido después de que habia escuchado la voz. 

Su voz.

Como un susurro.

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Espero que me hagan saber que les pareció esta historia que anda rondando por mi cabeza desde hace muchos meses.

La canción es de Glen Hansard y se llama "Lies", recomiendo escucharla.

Gracias por haber llegado hasta acá. Un beso.