Nightmare [jjk]

Nightmare| Capítulo VI

[contenido explícito!]

"I don't know why I run away
I'll make you cry when I run away..."

Save your tears, sonaba en la radio, no era la favorita de Jungkook, pero para Hyemin era una historia diferente, la tarareaba alegremente mientras miraba por la ventana.

Transitaban por una carretera ligeramente concurrida, no faltaba mucho para que llegaran al restaurante aunque no era algo que les preocupara realmente, ambos estaban sumidos en sus propios pensamientos, disfrutaban el recorrido a su manera.

Hyemin admiraba los puntos de colores que brillaban con intensidad y que convertían la ciudad en una pequeña galaxia, Seúl se transformaba por las noches, podría decirse que incluso cobraba vida. Jungkook por otro lado tamborileaba los dedos sobre el volante, no era alguien que amara conducir, pero aquella noche la experiencia era diferente, era maravillosa. Se regocijaba con la mera presencia y cercanía de Hyemin, y sentía la necesidad de exteriorizar la euforia que lo embriagaba y dadas las circunstancias, la única forma de hacerlo era a través de sus dedos.

De vez en cuando se tomaba un segundo para admirar el perfil de su acompañante, quien lucía preciosa con aquel vestido rojo borgoña que resaltaba su nívea piel. Recordó como Hyemin casi sufría un colapso por no saber que ponerse y una risilla se le escapó de los labios, llamando la atención de la chica que salió de su ensimismamiento.

—¿Qué?—suspiró risueña antes de voltear su atención a Jungkook, quién trataba de contener su sonrisa—¿Qué es tan gracioso?—inquirió con aire juguetón.

—Tú—soltó entre risas. Hyemin hizo un pequeño puchero mientras reía contra su voluntad, gesto que ensanchó la sonrisa de Jungkook.

—Eres muy lindo, Gguk—Bufó mientras colocaba un rebelde mechón detrás de su oreja y aunque no quisiera admitirlo, comenzaba a sentirse nerviosa por el hormigueo que sintió en su estómago cuando el muchacho sonrió.

—Me lo dicen seguido—Dejó de ver la carretera para mirarla de lleno y dedicarle un guiño, gesto que sabía de primera mano, ponía loca a cualquiera, Jungkook conocía a la perfección los pasos que debía seguir para conseguir que una chica se quitara las bragas sin siquiera pedírselo, pero de alguna forma, se volvía un novato con Hyemin, era como si toda su experiencia fuera reemplazada por torpeza.

—¡Vaya! no conocía este lado tuyo, casanova—Rió mientras le daba un golpecito en el hombro. Hyemin estaba más allá de lo fascinada por el cambio que su amigo había tenido en pocos días, había dejado por completo la timidez y ahora incluso coqueteaba sutilmente con ella.

—Hay muchas cosas que no sabes de mí, Hye—miró por el retrovisor antes de cambiar la velocidad—. Así como probablemente yo no sé de ti, es normal, llevamos poco tiempo de conocernos, pero conforme pase el tiempo nos conoceremos mejor— sonrió con una inocencia fingida y mordió su lengua por aquella mentira piadosa, pues ya sabía casi todo sobre ella, se había pasado los últimos días buscando arduamente su información y había hecho bien su tarea, de algo le servía tener un amigo experto en sistemas.

—Supongo, pero nunca se termina de conocer a la gente, ¿cierto?—Suspiró con nerviosismo y tomó preso su labio entre sus perlados dientes, definitivamente el Jungkook que había conocido no se parecía en nada al que estaba a su lado en ese momento, más varonil, más misterioso, más interesante. Rezaba porque no fuera pretencioso—. Comienzo a pensar que tienes más de una personalidad.

Una risa profunda reverberó en el auto.

—Si así fuera, ¿me tendrías miedo?—apagó el motor del auto y con el ceño fruncido posó su atención en la chica de labios rosados, quién pareció sorprenderse por la extraña pregunta.