El timbre sonaba descontroladamente, Harry ni se percataba de nada ni siquiera Caro, así que cansada salí de la cocina y abrí la puerta para encontrarme con Carla quien llevaba dos cajas enormes.
-¿Qué es eso? –Dije sorprendida
-Tu disfraz y mi disfraz –dijo sonriendo, entró y dejó las cajas en el suelo
-¿Elegiste un disfraz por mi? –Dije cerrando la puerta
-Si, es que es tan hermoso y la verdad se que te va a encantar ve –dijo agarrando unas de las cajas y subiendo arriba.
Lo seguí y entramos a mi habitación, Carla dejó la caja en la cama y me hizo señas como para que la abra y así lo hice, era un vestido rosa por lo que vi de una princesa, traía unos tacos plateados con brillos rosas y una mascara también con brillos rosas era perfecto.
-Es... –Carla me interrumpió
-Hermoso, se que a ti te quedara perfecto –dijo sonriendo
-Gracias –la abracé- ¿tu cual usaras?
-El de blanca nieves –reímos
Sentimos como alguien golpeaba la puerta, guarde el disfraz en la caja y la metí debajo de la cama. Carla abrió la puerta y nos encontramos con Caro quien entró a la habitación y se sentó a mi lado en la cama.
-Bien, ¿vamos a comprar las cosas para la fiesta? – dijo Caro entusiasmada
-Lo siento Caro pero ya las compré yo –dijo Carla
-Supongo que iré sola –sonrió y salió de la habitación
-¿Se enojo? –Dijo Carla preocupada
-Claro que no, Caro nunca se enoja –dije riendo
El día de la fiesta había llegado, estaba sola en la casa ya que Carla, Caro y Harry ya habían salido. Comencé a maquillarme y cuando termine sentí el timbre sonar era Carla que había venido a buscarme.
-¿Lista para su baile princesa? –Dijo bromeando
-Lista –reí
Subí a la gran camioneta y esta siguió el camino hacia la gran fiesta.
La casa estaba repleta de gente obviamente toda disfrazada, busque con la mirada a Harry pero era imposible encontrarlo; quería verlo, quería aunque sea ver como estaba disfrazado. Carla tomó mi mano y me llevo hasta el patio de la casa donde había una gran piscina, se acerco a un chico rubio de ojos celestes.
-Niall, ella es Karen, mi mejor amiga –dijo Carla presentándonos
-Un placer Karen -dijo el chico rubio sonriendo
-Igual Niall –le devolví la sonrisa
-Tengo que ir a saludar a los demás invitados, espero que la pasen bien –dijo yéndose hacia adentro
-Así que él es el dueño de esta casa –dije mirando a mis alrededores
-Si, es lindo ¿no? –Dijo Carla sonriéndome
-Para ti si –Mirándolo con cara de enojo
Siguió su camino admirando la casa al igual que yo, los tacones se me hundían en el césped pero no me importó, estaba sola y eso no me gustaba así que entré a la casa donde estaban todos los invitados y fui por algo de tomar, me estaba sirviendo algo de color rojo no sabia que era pero parecía rico, tome un trago y así lo era, me acomode la mascara ya que la tenia un poco torcida y ahí fue cuando sentí unos brazos sobre mi cintura y me susurraban al odio:
-¿Bailamos?
La música era lenta y esa voz yo la conocía era Harry, volteé para verlo y estaba vestido de príncipe con una mascara al igual que yo. Él tomó mi mano y sin dejarme hablar me llevo a bailar. Puso nuevamente sus manos en mi cintura e hizo que yo rodeara su cuello con las mías. En ese momento no pude evitar mirarlo a los ojos, esos ojos color verde que me volvían loca estábamos a pocos centímetros, las ganas de besarlo no me faltaban en ese momento.
Él me miraba a los ojos sin despegarme la mirada mientras bajaba a mis labios.
-Tienes los ojos verdes hoy –dijo mirándome aun más
Siempre los tuve verdes Harry, ahí fue cuando comprendí que pensaba que yo era Caro, no le respondí y solo le dedique una sonrisa. Estaba hundida en mis pensamientos sin prestarle la mas mínima atención a las personas de mi alrededor solo a esos ojos color verde que me volvían loca, no se cuando, no se como pero sentí la presión de los labios de Harry en los míos, me estaba besando.
