Capitulo 35

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Pues parece ser que he vuelto. Estaba inspirada y decidi escribir, asi que aqui teneis un corto capitulo para que sigais la historia. Espero que os guste.
-----------------------------------------------Creo que nos van a soltar- dijo Camino.

-Enserio? Como lo sabes?

-He escuchado a un chaval que ha pasado delante de mi celda diciendo que Miguel ha cedido la ciudad.

-Que? -Hice una pausa- esto es de locos, co-como se le ha ocurrido hacer eso?

-No lo se- dijo mientras se encogía de hombros.

-Este es retrasado.

-Ya tendrás tiempo de pegarle y decirle cuatro cosas cuando estemos allí.

La puerta se abrió y apareció el armario andante que traía cogido como si fuese un bolso al chico que había visto en el parque por la noche, el hermano de Nuria. Le arrojo dentro y volvió a cerrar.

El chico se retorció en el suelo. Estaba consciente y parecía estar bien.

Camino se acerco rapidamente a el y le ayudo a levantarse.

-Estais bien? -dijo refiriendose a los dos pero solo ayudando al chico, el cual ahora era la prioridad debido a su mal estado.
-Estamos bien, o eso parece. Por que nos han reunido?- preguntó Nuria.

-Creo que nos van a soltar- dijo Camino

Los cuatro permanecimos en silencio lo que a mi em parecieron horas hasta que la puerta se abrió.

-Sois libres- dijo "Rompehuesos" y se aparto de la puerta como invitandonos a salir corriendo escopetados como liebres que hullen del perro de caza.
Y eso fue lo que precisamente hicimos. Los cuatro nos levantamos y yo ayude al chico, al que aun no me habian presentado y por lo cual no conocia su nombre, a andar porque aun se encontraba debil. Nos esperaba una larga caminata de vuelta a casa, o mas bien al centro de la ciudad. Los cuatro caminamos durante aproximadamente una hora hasta que llegamos a la plaza del reloj. Todo estaba lleno de camiones y autobuses.

Definitivamente, nos ibamos.

Los niños nos recibian con muestas de cariño y entusiasmo. Pero todo el mundo seguia trabajando cargando bienes en los transportes.

Llegamos hasta donde estaba Miguel. Y los cinco nos fundimos en un abrazo.
Tenia la intencion de ser el primero en pedir explicaciones, pero aqui la señorita impertinente muy fiel a su estilo se me adelanto.

-Que has hecho?- pregunto Camino.

-Nos vamos- dijo Miguel, y se quedo
callado durante unos segundos.

HASTA LOS 18Donde viven las historias. Descúbrelo ahora