Capítulo Veintiocho

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Mamá trabajaba mientras que yo esperaba en la entrada de la casa al chofer... a la chofer

Habíamos llegado hace dos días a la ciudad

Amber nos llevaría a la veterinaria, Ruski empeoraba y no estaba dispuesta a verle sufrir de esa manera por lo que decidí que si mi mamá no me llevaba yo misma iría

Japón, Alemania, Sur, Bielorrusia, Colombia y Puerto Rico iban en mi mochila en la cual... solo estaba mi teléfono y un chocolate

- No se coman mis chocolates o los tiro al basurero -Amenacé en un susurró para luego alejar mi cara de mi mochila

El sonido de una bocina me llamó la atención, Ruski miró hacia el frente

Amber estaba en coche con una sonrisa, con un movimiento de cabeza me anunció que fuera con ella

Sonreí y con Ruski nos subimos al auto... no sabía si esto terminaría bien o mal

Habíamos llegado hace 15 minutos, Amber me esperaba afuera para volver a casa y Ruski jugaba con mis cordones

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Habíamos llegado hace 15 minutos, Amber me esperaba afuera para volver a casa y Ruski jugaba con mis cordones

- Todo estará bien bebé -Susurré

La puerta fue abierta dejando ver a un chico que desconocía, este sonrió y se retiró con su bulldog

Seguido de él salió la veterinaria

- Buenas tardes ¿Qué puedo ofrecerte?

- Uh.... ¿Podrías ver a Ruski? -Señalé al San Bernardo decaído en mis pies- Esta débil, no come, no corre, no juega... parece muerto

- Creo que se que puede pasar... ¿Cuantos años tiene?

Mi cara palideció

Salí de la consulta con Ruski algo más animado pero seguía bajoneado

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Salí de la consulta con Ruski algo más animado pero seguía bajoneado

Entré al auto y Amber abrió la boca para hablar pero negué y seguí observando por la ventana mientras que una lágrima se escapaba de mi ojo y recorría mi mejilla

A Ruski en una semana le pondrían la inyección... la inyección que me obligaría a decirle adiós por siempre

 la inyección que me obligaría a decirle adiós por siempre

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Babys || Countryhumans X LectoraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora