Lo que está prohibido me hace feliz (Supernatural- Terminada)

Capítulo 8

Aquella soleada y calurosa mañana, dos dias despues de haber llegado a la Wincueva (asi se me ocurrio llamarla, y a Dean por supuesto le encanto), sali a correr con Adonis. Mi pobre mascota debia sentirse frustrada de pasar todo el dia encerrado entre cuatro paredes, olfateando muebles y meando alguna que otra revista playboy. 

Como hacia bastante no me ejercitaba solo estuvimos fuera una hora, pero a Adonis le encanto. Lo malo fue que no podia seguir un ritmo constante debido a las infantables marcas de territorio que mi perro dejaba en cada arbol que veia. Yo aun no entendia como un animal relativamente pequeño pudiese producir tanta orina. 

Llegue totalmente sudada, y como preferia sentarme un rato a leer y escuchar musica, deje la ducha para mas tarde. Me quite la remera quedando en brasier deportivo y me heche en un sofa con el libro de Supernatural y mis auriculares puestos. 

Al rato llego Dean vistiendo el traje del FBI con unos papeles en mano. No sabia en realidad que habia salido; seguramente habria ido a investigar algun caso nuevo, pero Sam no estaba con él.

-Felicidades- me dijo lanzandome con muy poca cordialidad uno de los documentos- eres oficialmente una Singer. 

-¿Qué?- exclame. Revise la carpeta, y efectivamente mi ADN cohincidia con el de Bobby- ¿como...?

-Extrajimos un poco de tu sangre cuando te desmayaste por la herida en la pierna. No te lo dijimos porque, obviamente, harias un berrinche de niñita de 5 años- dijo desde la cocina.

-¡Que poco me conoces!- le grite riendo.

Al rato lo tenia sentado junto a mi con dos cervezas. Me bebi la mia en solo dos tragos.

-Ei, tomatelo con calma. 

-Bueno, por lo que se Bobby fue toda su vida un alcoholico sin remedio. Debo seguir sus pasos para hacer honor al apellido y ser digna de llevar su sangre.

-Creeme, Bobby fue mucho mas que una vieja botella de whisky con gorra. 

-Por cierto, ¿como consiguieron su ADN? ¿No se supone que deben quemar todas sus pertenencias?

-Justamente lo hicimos para que el espiritu de tu viejo no volviera a aparecer. Pero olvidamos su petaca, y el muy hijo de puta se habia encadenado a el. Cuando lo descubrimos nuestra primera intencion fue destruir el objeto...pero, ya sabes.- Dean le dio un sorbo a la cerveza y me sonrio- Los Winchester no somos de tomar desiciones muy coherentes.

-Permanecio con ustedes en el plano terrenal- le dije entendiendo al instante a qué se referia.

-Si, hasta que la sed de venganza lo enloquecio por completo y bueno, hicimos lo que teniamos que hacer- en cierta forma me entristecio saber que mi padre seguramente estaria ardiendo en las llamas del infierno. No lo conocia, pero nadie se merece tal castigo. Dean al parecer me leyo la mente y dijo- pero descuida. Una de las pruebas para cerrar las puertas del infierno era enviar un alma inocente desde alli abajo al cielo, y tu viejo fue el elegido. 

Suspire un tanto aliviada, aunque no me habia quedado claro de donde habian sacado el ADN de mi ya oficialmente padre.

-La cuestion es- siguio Dean- que unos días despues de eso encontramos un frasquito de sangre con la etiqueta que rezaba su nombre. Y como ya teniamos certeza de su seguridad la guardamos por si alguna vez nos hacia falta. 

-Vaya.

No sabia qué pensar con respecto a la inesperada noticia. Nunca me senti su hija ya que, justamente, no tenia pruebas de que mi madre me hubiese dicho la verdad. Pero tampoco me aliviaba tener en mis manos la certeza de ser su progenie.