Narra Rafa:
Estoy muy nervioso, hoy nos iremos por fin a Barcelona, uno de mis mayores sueños y el de mis mejores amigos, al fin se cumple. Horas antes, quedamos en un bar, para hablar, como siempre o casi siempre solíamos hacer.-¿Estáis nerviosos?- dije al mismo tiempo que bebía un poco de mi café con leche.
- Hostia, ya ni me acordaba, ¿enserio nos vamos hoy?- Comentó Javy entre alguna que otra risa.
-¿Esta es otra de tus bromas Javy?- Dijo el rubio clavando su mirada en Javy mientras bebía un sorbo de su café.
Tras una conversación larga y tendida, una conversación normal, la típica entre tres amigos, cada uno se fue a sus respectivas casas a despedirse de sus familiares y hacer las maletas.
Narra Rafa:
Ya me he despedido de toda mi familia y mis amigos, voy camino a Barcelona, montado en el Ave y mirando el bonito paisaje del verde bosque por la ventana. Era un paisaje acogedor, desearía estar en ese momento ahí para disfrutarlo más de cerca. El camino se hizo bastante largo, por lo menos para mí, aunque hablamos de cosas muy interesantes. Estuvimos hablando de música, instrumentos, sobre el piso y la universidad, sobre cómo será la vida allí y también, de algún que otro cotilleo.
Tras horas de trayecto llegamos, pagamos un taxi y nos llevó rápidamente a nuestro apartamento.
Al entrar, me di prisa para coger la habitación más grande, cuando llegué a esta, me tiré en la cama dejando las maletas y mochila tiradas por ahí.Pasaron unas dos horas, y después de ordenar toda mi habitación a mi gusto, fui al salón, dónde se encontraban mis dos compañeros de piso.
-Ey chicos, voy a dar una vuelta por el barrio para conocerlo más, ¿os venís?- Dije intentando no mostrar mucho interés, aunque me hacía muchísima ilusión.
- Buf, ¿ahora? Que pereza, además mañana hay clase y aún tengo que ordenar mi habitación- Dijo el gaditano intercalando suspiros entre algunas palabras.
-Yo tampoco voy Rafita, tengo mucho que ordenar y que hacer, pásatelo bien- Dijo Gèrard levantándose del sillón y dirigiéndose hacia su habitación.
-Vayaa, si que sois aburridos- Dije riendo un poco mientras me colocaba un auricular. - Me voy, no me esperéis para cenar, seguramente llegaré un poco tarde- Me puse el otro auricular y puse mi playlist mientras salía por la puerta.
Caminé por la calle, era una sensación genial, muy tranquila, alumbrado y guiado por la luz de las farolas que no se habían fundido aún. Caminaba con las manos en los bolsillos mirando al suelo, y fue un descuido por mi parte, ya que en ese momento me choqué con alguien. Levanté la vista para mirarle aunque estaba todo muy oscuro.
-P-perdón, iba despistado- Dije intentando descubrir su silueta tras la sombra oscura de la noche.
-Para la próxima, ¿podrías tener mucho más cuidado y mirar por dónde andas?- Dijo una chica, bajita, bueno, más o menos de mi altura, seguía sin poder ver su rostro por la oscuridad de la noche.
-Sí, lo siento mucho, de verdad- Jugué con mis manos, ya que estaba nervioso.
La chica suspiró, y se fue dejando el increíble aroma de su perfume. Miré hacía atrás, como hacen en las películas a cámara lenta, pero seguía sin haberle podido ver, lo único que conocía de esa chica, era el fuerte perfume que llevaba.
La verdad, no sabría describir lo que sentí exactamente en esos 2 minutos, fue una sensación extraña. Seguí caminando, absuelto en mis pensamientos sin dejar de pensar en esa chica y en su oloroso perfume. El frío se apoderó rápidamente de cada rincón de aquella oscura calle por la que caminaba, ya no había nadie y parecía ser tarde, así que decidí volver.
Abrí la puerta con las llaves que me había llevado, dejé los zapatos en el zapatero de la entrada y fui al salón. Al ver que mis amigos no estaban me asusté un poco, pero miré que las agujas del reloj marcaban las 1:30 de la mañana, entonces comprendí que estarían dormidos. Caminé hacia la cocina, tampoco tenía mucha hambre, comí tan solo una ensalada y un yogurt.
Volví a mí cuarto, cerrando la puerta por si acaso a Javy se le ocurría gastarme una broma. Me tumbé en mi cama escuchando mi playlist mientras leía uno de mis libros favoritos. Y a los minutos, me quedé completamente dormido.
Esto es solo un pequeño paréntesis, esa noche no descansé mucho, estaba nervioso y además la postura que encontré al dormirme era bastante incómoda. A las 7 y media de la mañana, me había olvidado completamente de encender el despertador y bajar las persianas, la luz entraba a mi habitación haciendo que abriera un poco los ojos. Me froté los ojos y miré la hora, me tranquilicé, ya que por momentos pensaba que llegaría muy tarde. Me duché, me vestí muy casual, con una camiseta negra, unos vaqueros y unas zapatillas de deporte, tampoco quería destacar mucho.
Fui a la cocina, y allí se encontraban mis dos amigos desayunando.
-Buenos días- Dije a la vez que comenzaba a prepararme el desayuno.
-Buenos días- Dijeron mis dos amigos al unísono.
-Estoy bastante nervioso, además no estoy en vuestra misma clase, estoy completamente solo- Dije mientras me sentaba y comenzaba a desayunar.
Tras un rato de charla, mis amigos se fueron y yo tardé un rato más en salir. Me colgué la mochila al hombro y caminé hacia la universidad, con miedo y ganas a la vez.
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Entre miradas
RomanceLas miradas dicen más que las palabras. ✨ Introducción: -Rafa es un chico cordobés, de pelo castaño y rizado, ojos marrones y profundo, y bastante sencillo. Se mudó a Barcelona para seguir con sus estudios en la universidad. Alquiló un piso junto co...