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✾Capítulo 4:Una simple lectura

Llegaron a lo que era la cafetería, por suerte no estába muy lejos de la Universidad así que no había nada del por que preocuparse:—¿Que vas a pedir?—le dijo tranquilo, sereno, con un poco de indiferencia.

—.Un capuchino, por favor—pronunciaron sus labios en un tono bajó, que parecía que se lo decía más para si misma que para él.

—Vale, está bien—se quedó viendo el menú un par de instantes y decidió hablar:—¿y de postre?

—Un tres leches

—¿Te gusta eso? Ahg—se quejó, a Sebastián no le gustaba ya que él era intolerante a la lactosa y por eso era su gran asco “Por no poder comer o beber cualquier producto con leche”.

—Si me gusta, ¿y?

Sebastián prefirió callar, no quería discutir con ella, sabía que Emily no sé encontraba en las mejores condiciones sentimentales y no quería provocarle otro dolor de cabeza.

—¿Ya han decidido que ordenar?—dijo la jóven con una sonrisa.

—Si, yo voy a querer una Coca-cola.

—Y ¿para la dama?

—Pregúntele a ella, no a mí

La joven puso una expresión en su rostro de desaprobación:—“¿y éste quien se creé que es? ”—pensó con cierta molestia. En fin hizo sus pensamientos aún lado, carraspeo y se dirigió a Emily:—¿Y usted señorita que va a ordenar?—le decía con amabilidad y una sonrisa radiante.

—Un capuchino y un tres leches.

—Ya se los traigo. —se marchó la joven.

—Idiota—dijo en un susurró (el cual éste era dirigido a Sebastián) apartó la mirada hacía otro lado, a lo que no fuera Sebastián.

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—¿Ya estás mejor?—Dijo curioso y con una cierta preocupación hacía ella:—. ¿Por qué rayos sentía la necesidad de ayudarle?, Sí básicamente ella me había tratado del asco—pensó con incomodidad sin poder comprenderse así mismo.

—Algo así—Dijo ella con la voz quebrada, haciéndolo salir de sus pensamientos.

—Ya es un avance—dió un suspiro:—cómo que ya se tardó mucho la órden, ¿no crees?

Emily prefirió guardar silencio, no deseaba hablar pues había visto algo que realmente le disgustaba, ver a su ex novio besando a su nueva pareja, no pudo controlar sus impulsos y arrastró la silla hacía atrás con brusquedad, y empezó a caminar lejos de ese lugar, no quería ver eso la partía en dos, el nunca la había besado a ella, su ex novio siempre le decía “luego, en otro momento” ponía miles de Pre-Textos para no hacerlo, bueno al fin y al cabo, ellos sólo estaban juntos por que sus padres así lo habían decidido, Emily si sentía algo por el, pues era su amigo de la infancia pero el no sentía absolutamente nada por ella, sólo amistad.

La persiguió—¿Qué sucede?—la tomó de la mano:—¿Que pasá?—volvió a repetir.

—Nada

—Vamos, dime

Nuevamente Emily guardo silenció, pero está vez ladeo la cabeza en un no. Sebastián dió un pequeño suspiro y le dijo:—¿Que sucede? Emily. Se que para ti soy un completó extraño pero, ¿Que sucede?

Se mordió el labio inferior, en un intentó de no llorar pero no pudo contener sus lágrimas y empezó a llorar parecía un niña, en ese instante Sebastián comprendió su dolor, la tomó de la mano y empezó a caminar.