Love Is (Jikook)[Adap.]

|•Capítulo O3•|

A decir verdad, la mayoría tomó distintos caminos al que eligieron inicialmente.

Jungkook debe decir que las llamadas de Jimin eran precisas y aún a la distancia, él continuaba pensando la mayor parte del tiempo en su amigo. El más alto se mudó a Seúl por su carrera un año después de que Jungkook iniciara la facultad e hizo una audición en una empresa que afortunadamente lo reclutó y aunque ahora estaban más cerca, sus ocupaciones les quitaban tiempo.

Yoongi era uno de los profesores de una escuela de baile en una costosa escuela de artes, lo era incluso antes de graduarse porque por el momento era un ayudante. Namjoon, él al final terminó siendo un jodido idol de hip hop y un poco de pop con mucha suerte al ser descubierto en el supermercado por un caza talentos mientras tarareaba y rapeaba una canción con su espectacular voz al hacer las compras. Seokjin se volvió el guapísimo manager de Namjoon, él si cumpliendo su promesa de que estaría al lado de Namjoon en todo momento y Jimin, como lo dijo también, era el guitarrista, aún trainee de una banda con integrantes coreanos y chinos que últimamente estaban tomando popularidad entre las chicas que oían hablar de ellos aunque aún no habían debutado.

Todos habían tenido tal vez suerte, o simplemente ya estaban destinados para ello, sin embargo, a veces Jungkook solía pensar que él era el menos afortunado de todos sus amigos de la infancia cuando se ponía a ver lo que ahora eran. Verse con Namjoon o Jimin más a menudo ya no era una opción al estos ser estrellas y cuidar de su vida privada, de todos modos, a veces, cuando había tiempo lograban reunirse todos como en el pasado.

Jungkook abrió los ojos y al fijarse en toda la luz que ya se colaba por la ventana de su habitación, de una patada se apartó las cobijas de encima y se fijó en la hora en su celular comprobando que sí, se había quedado dormido. ¡Joder! No había escuchado la alarma y ya era tardísimo.

Casi a la velocidad de la luz se cambió con lo primero que vio y casi casi se cepillo los dientes durante el caminó a su salón de clases. Lo bueno era que su dormitorio en el campus no quedaba lejos de su primera hora de clases ese día, sin embargo, se retrasó un poco más cuando se topó de frente a una multitud de chicas gritando emocionadas el nombre del bastardo de su amigo.

Como amaba la atención innecesaria Namjoon.

A Seokjin aún le faltaba un año para graduarse a pesar de ser el mayor de todos luego de su retardo para continuar sus estudios al estar ocupado con la agenda de Namjoon, aunque no constante pero si de vez en cuando, Namjoon pasaba por la facultad para dejar a su manager antes de él e ir a la empresa aunque no era necesario, siempre alterando a muchas muchachitas de ahí y de otras escuelas.

Jungkook lo miró de reojo, estaba en su camioneta con vidrios polarizados pero la ventana en donde iba él abajo. Seokjin de forma descuidada bajaba con sus cosas e intentando alejar a las fans del lugar mientras el ahora apodado RM sonreía abiertamente como hijo de puta. Jungkook sabía que estos dos siempre andaban juntos no sólo porque eran idol-manager, sino también eran pareja aunque el mundo del entretenimiento y las fans que no eran sasaengs no lo supieran.

Jungkook apresuró el paso y llegó con retardo a su clase, pese a eso la profesora lo dejó entrar y ponerse al corriente con la clase. A veces el aún castaño pensaba en que hubiera sido de su vida su se quedaba con sus amigos, probablemente también el ahorita sería un idol o trainee a punto de debutar, no obstante Jungkook amaba realmente la carrera que ahora llevaba y la cual cambio un año después de entrar, además estaba a nada de graduarse, así que no tenía mucho tiempo para quejarse aunque fuese difícil, no obstante no dudaba que la vida de Namjoon y Jimin también lo fuera.

Cuando terminaron todas sus clases del día, fue directo a su habitación.

Si lo pensaba bien, su vida no era mala. Tenía muchos amigos en la facultad, un buen promedio y una pareja desde hace seis meses con cual tenía buen sexo cada que se les daba la oportunidad y sí, a comparación de sus amigos de la infancia, su vida era más tranquila y normal.