No te conozco, pero siento como si te conociera
No sé bien quién eres, pero eres, quien yo quisiera.
Pues, aunque no sepas, me has llegado a alegrar
Eres como una bella brisa de mar.
Como un suspiro en verdes praderas de montaña
Como el agua pura, de un manantial, que me baña.
Pues, no te conozco, aunque te he llegado a conocer.
Pues no te he reconocido, pero eres parte de mí ser.
Eres como esas greñas, que en ti hoy portas
Como esa piel blanca, que brilla y me encanta.
Como esos ojos cafés, que me encantan beber.
Con, o sin azúcar en tu mirada.
Pues, un día puedes tener una dulce voz
Y otro día, un delicioso amargor.
Un día, me puedes alegrar.
Otro día, solo hacer dudar.
Pues, aunque no te conozco hoy
Nunca dije, que mañana no te pueda conocer.
ESTÁS LEYENDO
Aullidos
PoetryAullidos a la noche, extractos de un corazón herido y maltrecho, que a veces busca algo de amor o sencillamente, donde morir.