Viento helado, el sonido de algunas aves, las hojas volando de un lado a otro por el aire, silencio, calidez, una cabaña en medio del bosque siendo testigo de una historia que comenzaba a nacer; Dos cuerpos descansando ignorando su alrededor, ignorando sus problemas más allá de lo que se encontraba en el exterior del bosque, solos, sin reglas.
El poco de luz que se colaba por la ventana de aquella cabaña, daba directamente al rostro del chico de piel pálida que comenzaba a incomodarse por el reflejo que se posaba sobre sus parpados, obligándolo a moverse con lentitud tratando de alejar su rostro del intruso que se empeñaba a despertarlo; una ráfaga de viento helado lo hizo salir de su ensoñación abriendo lentamente sus pesados ojos, cayendole como un balde de agua los recuerdos, así como la razón por la que se encontraba ahí y no en su cómoda cama dentro de su departamento.
Miro al frente notando la madera vieja que era parte del techo de aquella cabaña, suspiró resignado de lo que había ocurrido y ahora estaba viviendo, una de sus manos se levantó cubriendo sus ojos para apartar la luz que dañaba sus pupilas, se sentía agobiado, así como un tanto confundido, sin embargo, sus pensamientos no lo dejaban recordar sobre un pequeño detalle, no fue hasta que este en un intento de levantar su brazo derecho se percató sobre un peso que le impedía realizar cierta acción bloqueando el poder moverse, algo incómodo y extrañado, bajo el brazo que había utilizado con anterioridad para cubrir sus ojos y giro su rostro notando una cabellera rosada proveniente de lo que al parecer era alguien.
Algo intrigado e irritado se levantó con brusquedad sosteniéndose de su brazo derecho, el cual era abrazado por el chico a su lado y no lo dejaba salir del todo de la colcha en donde se encontraban durmiendo. El pálido sin tacto alguno, quito con fuerza su brazo de los contrarios que se aferraba a este, provocando que por el forcejeo, el contrario despertara.
El chico de cabello rosa arrugó la nariz y restrego sus ojos con sus manos, las cuales eran cubiertas por su suéter rosa, levantandose del sueño tranquilo que estaba teniendo tratando de enfocar su vista en quien se había atrevido a despertarlo, percatandose del chico de piel pálida que lo veía con enojo, o al menos eso pensó el chico de cabello rosa.
El menor sin entender el porqué el pálido se encontraba de esa forma, dio un bostezo y levantó sus brazos estirandose, regresando sus sentidos para comenzar a procesar lo que estaba pasando. El pálido por el contrario dio un chasquido con la boca y se levantó ignorando al chico que se encontraba levantandose aún, camino hasta su mochila comenzando a meter a esta, toda la ropa que había sido utilizada por ambos la noche anterior en busca de protegerse del frío, mirando de igual forma las acciones que el menor estaba realizando, pues este se encontraba sentado en la colcha con los ojos cerrados, las mejillas rojas al igual que la nariz por el frío, con el cabello alborotado en clara señal que de aun estaba despertando y con unos labios algo resecos por la heladez que los deshidrataba, toda una imagen nueva que el pálido tenía de aquel chico.
El mayor al terminar de meter todo en ambas mochilas, se levantó reacomodando su propia ropa que se encontraba algo desordenada por la noche en que había dormido.
-Muévete, debemos irnos, dormimos más horas de las planeadas, a este punto, puede que ya nos estén manteniendo el paso. -Habló el pálido tomando su mochila colocándola sobre su hombro y con la otra mano tomando la mochila rosa del chico contrario.
El chico de cabello rosa asintió levantandose de la colcha en donde se encontraba sentado tambaleándose un poco al sentir un pequeño mareo en cuanto estuvo de pie, siendo sostenido del brazo por un fuerte agarre por parte del pálido para que este no cayera y se sostuviera. En cuanto tuvo estabilidad, dio una corta reverencia en señal de agradecimiento hacia el mayor, comenzando a seguirlo en cuanto este camino fuera de la cabaña, siendo golpeados ambos por el viento helado y las hojas que volaban de un lado a otro.
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El Chico Pink Jimin. (YoonMin)
Fanfiction"El rosa es bonito, ¿A ti te gusta el rosa?🌸" Gracioso, mudo y de color rosa, sobre todo color rosa, era la razón por la cual a Jimin le gustaba "La Pantera Rosa". El fuerte siempre se asegura de arruinar la vida del débil, ¿No es así como funciona...