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La espera estaba terminando con su paciencia y su poco control manteniéndolo nervioso, algo no común en él y su alfa, no cuando se trataba de cosas personales.

Al principio creyó que no existía un gran problema con los padres de Taehyung por ser quién era y por el estatus que mantenía su familia, grave error, eso no sirvió de nada al tener de frente a la pareja, cara a cara, que las ganas de ir se incrementaba a cada segundo gracias a los reclamos y reproches que estaban recibiendo por el alfa de la familia Kim, siendo su irresponsabilidad la causa principal del enojo del padre de Taehyung.

Apesar de ser un alfa prestigioso y respetado que nunca agachaba la cabeza ni se mantenía de rodillas ante nadie –ni con sus padres –, parecía que eso había cambiado en esos momentos. Dejando que el alfa lo regañara hasta que se si sintiera satisfecho y su enojo disminuyera, no era para menos, comprendía que había sido su culpa el que eso ocurriera al no presentar sus respetos desde que ocurrió aquello.

Personalmente, estaría de esa misma forma si le hubiese ocurrido algo similar, por lo que solo mantenía la cabeza inclinada hacia abajo, de rodillas frente al padre de Taehyung que emanaba un fuerte aroma a enojo y desaprobación. Sus padres permanecian en silencio sentados en el sillón detrás de él en silencio.

Bendito momento en el que Moonbyul se ofreció ir a buscar a Taehyung a la universidad, sino estaría burlándose de su desgracia y apoyando al señor Kim para que lo regañara aún más de lo que estaba recibiendo, aunque ahora esperaba que no tardaran mucho en regresar, no sabía cuánto tiempo más podría aguantar los regaños del alfa.

— .. es un falta de respeto para nosotros, para mí familia y para mí hijo el que no se haya dignado en presentarse ante nosotros ni siquiera comunicárse con él, sabe lo dudo que es para mí hijo el que este solo y sin su alfa. — escupió el alfa sentándose en su sillón color amarillo al lado de su esposa que mantenía su semblante serio al igual que su hijo alfa.

Toda la familia estaba en ese estado que hacía pesado el ambiente y las malas vibras, era hasta más escalofriante que cuando tenía a toda la familia Min de frente el fin de año, esto superaba cualquier evento familiar en el que había estado nunca.

La campana de la entrada del local sonó avisándole a todos que Taehyung y su hermana había llegado, rogaba por qué fuera así y no siguiera escuchando los reclamos de su familia.

Espero impaciente a qué los recién llegados subieran los escalones y pudieran entrar a la casa de la familia, estaba odiando el hecho de que el hogar de los Kim estuviera arriba del local de pollo por qué hacía más lento el llegar ahí con ellos inmediatamente.

Supo que estaban a mitad del camino cuando el aroma dulce de Omega caló en su interior y demasiado suave algo que agradecía infinitamente.

Alzó la mirada cuando la puerta fue abierta y de ella entro tímidamente el Omega, sus manos ligeramente temblando entrelazadas sobre su estómago, sus jeans azules ceñidos a sus piernas, una sudadera gris cubría su cuerpo perfectamente hasta la parte baja de sus muslos ocultando sus dedos entre las mangas de la misma, un cordón colgaba del cuello del chico pertenecientes a la sudadera. Su mejillas rojas– probablemente a causa de la vergüenza o la forma en la que estaban sucediendo las cosas–, sus labios sellados en una línea recta que lo hacían ver decaído y enojado al mismo tiempo, sus ojos estaban rodeados de dos bolsas moradas causadas por la falta de sueño.
Apesar de que sus mejillas estaban rojizas se podía ver claramente la piel pálida y sin color que decoraba su rostro.

¿No se estaba alimentando bien?

¿Cuánto tiempo llevaba así?

— B–buenas tardes..— saludo en un susurro mientras hacía una reverencia de noventa grados.

— Qué bueno que has llegado Taehyung, pasa siéntate ahí. Tenemos muchas cosas que arreglar ahora mismo. — el Omega obedeció manteniéndo la mirada al piso.

— Bien, ahora estamos todos..— como supuso el señor Kim volvió hacer incapiee en mal alfa y hombre que había sido con su hijo al dejarle botado por muchas semanas sin comunicárse con su hijo ni una sola vez.

Y ese discurso parecía no tener fin.

¿Por qué sus padres no decían nada?

¿Por qué no lo defendían? Se podía defender él solo pero no estaba en una situación muy 'comoda' para hacerlo. Por lo menos sus padres debían interferir un poco.

Después de algunos minutos hablo.

— Me disculpo sinceramente señor y señora Kim, mi intención no era que esto sucediera de está forma. No lo tenía premeditado para que sucedieran así y de verdad lo lamentó.  No es justificación lo que voy a explicarles con respecto a su ausencia y descortecia pero desde que ocurrió aquella noche, las cosas han resultado más complicados de lo que pode esperar. Cómo sabrá mi familia es importante en este país. — informó tragando de que ese hecho significativo le diera puntos a su favor y su disculpa fuera aceptada. — Soy el presidente del grupo Min. — informó con orgullo.

— Ese es lo que es peor..— comento el padre del Omega con decepción.

— Como decia..— recompensó su postura tratándose de poner de pie pero el palo de la escoba siendo inmediatamente alzado frente a él lo obligó a permanecer en su mismo lugar y posición. — Mi agenda se mantuvo llena todos estos días, salí al extranjero para unos asuntos de la compañía y a mi regreso los asuntos del país me mantuvieron ocupado más de lo que deseaba.

— Señor y señora Kim, nuestro hijo ya explico su situación y nosotros somos concientes de lo que pasó, y como él también lo sentimos, ¿No cree que ya ha sido reprendido suficiente? — interfirió su padre a sus espaldas.

— No creo que lo entiendan señores, si ustedes estuvieran en mi situación entenderían porqué no puede pasar simplemente así como así. Se que ha sido suficiente pero lo que quiero que aprenda ahora es que situaciones como estás se deben resolver primeramente, no después, ahora si esto lo hace ahora que aún no se han casado no me quiero ni imaginar cuando lo estén, no quiero que un día así como así me lo vengan a dejar y lo hagan sufrir. No soy tan viejo como para no defenderlo y protegerlo. Y no por que ustedes tengan todo el dinero del mundo van hacer lo que quieran, por qué mi familia ni yo lo permitiremos.

— Lo entiendo perfectamente señor Kim...

— Parece que no es así..— reprochó el señor Kim dejándolo sin palabras.

— Le doy mi palabra de hombre, padre y alfa que eso no ocurrirá señor Kim, el honor y responsabilidad de mi familia es algo indiscutible y que está muy presente.— prometió su padre con voz decidida y firme.

— Eso me parece perfecto. Quedando ese punto claro ahora sí podemos ponernos de acuerdo con la fecha de la boda.

— Me parece bien. ¿Qué proponen, hijo, Taehyung? Es su boda por lo que su opinión es la importante y la que cuánta.— paso saliva con nerviosismo.

No se esperaba el cambió tan drástico del ambiente y de la conversación en menos de un minuto después de un largo y duro regaño hacía su parte.

— Tomen en cuenta sus planes y proyectos antes de que tomen la decisión.— propuso su madre.

— ¿Por qué no hablan en privado y ya después nos informan la decisión a la que llegaron? — propuso su hermana.

— Me parece bien. ¿Qué dices Taehyung? — preguntó pensando que era lo más correcto para todos.

—  S–si, está bien.

MORDIDO POR ERROR♣ Yoontae♣Donde viven las historias. Descúbrelo ahora