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—Ufff...—vuelvo a resoplar después de que la alarma haya sonado por lo menos 12 veces más. Odio madrugar, pero hoy no iba a ser un día aburrido, después de todo lo que había pasado, volvía al instituto.
Después de vestirme bajo a desayunar y saludo a mi hermano, y cuando terminamos, me aseo un poco más y salimos hacia la parada.
—Oye Dani, ¿tú sabes qué van a hacer hoy?—le pregunto a mi hermano.
—Mmmm... no sé hermana, la verdad es que no he escuchado nada—dice pensando.
—Bueno y ¿qué tal en clase?—él ya estaba en tercer año y creo que le va a cortar un poco, aunque él es muy listo.
—Bien, hemos empezado a hacer cosas difíciles y eso que acabamos de empezar el trimestre pero lo llevo bien—sonríe.
—Eso esta muy bieen, así podrás conseguir lo que te propongas, trabajando, ya tendrás tiempo de descansar—digo mientras llegamos a la parada.
—Gracias hermanita—intento darle un abrazo pero me pega y le vuelvo a pegar, paramos, y empezamos a reírnos.
Saco mis auriculares del bolsillo y pongo música mientras los conecto al móvil, odio hablar por la mañana porque tengo sueño y estoy de mal humor, pero a la vuelta por la tarde, mis amigos y yo siempre nos lo
pasamos genial.
El autobús cada vez estaba más cerca del instituto y yo más nerviosa, no sé qué haré cuándo llegue ni como reaccionaré pero bueno, voy a relajarme porque si voy nerviosa es peor todavía. Se abren las puertas y todos se van bajando, yo
bajo y empiezo a hablar con Claudia mientras caminamos hacia el
instituto y vamos hacia nuestro grupo de amigas. Algunas personas ya me habían reconocido y me habían dado los buenos días, yo se los había devuelto con una sonrisa.
—¡Hombreee! Nuestra heroína—grita Celia.
—Uy si, soy wonderwoman mira—y subo mi brazo hacia arriba con el puño cerrado y todas nos reímos.
—¿Qué tal?—pregunta Mireia.
—Meh, no puedo dormir por este lado, y ahora dejadme un sitio en el banco que me quiero sentar—bostezo.
—¿Sabes ya lo que te han preparado?—pregunta Eva.
—Dime que nada por favor—suplico.
—Nosotras no sabemos nada—dicen todas a la vez.
—Dais miedo—reímos todas.
Estaban llegando Cam y Myriam, ellas dos van en otro autobús y al dar los buenos días, sonó el timbre.
Cada vez estaba más nerviosa y tenía que controlarme. Justo cuando entro en el edificio me encuentro con uno de mis mejores amigos.
—Pero buenoo Kylie, ahora te tengo miedo y todo—me dice Alejandro nada más verme.
—Buenos días a ti también—digo rodando los ojos.
—Que es broooma, ¿qué tal la herida?—pregunta.
—Mejorando, no ha sido mucho—digo y justo llega otro amigo.
—¡Hey Kylie! ¿Qué pasa?—nos chocamos las manos Pedro y yo haciendo un saludo qué tenemos los chicos y yo.
—Bien tío, ¿Y qué os contáis?—pregunto subiendo las escaleras.
—No mucho, ¿sabéis que hay un nuevo en nuestra clase?—habla Pedro.
—No jodas—dice Alejandro.
—¿Pero y tú? ¿Cómo te enteras de todo?—empezamos a reírnos.
Ya estábamos entrando a clase cuándo había un chico en el sitio que está justo a mi lado, era guapo, no voy a mentir, pero lo que tenía de guapo en mis pensamientos se esfumó cuándo abrió la boca.
—Hola preciosa—habla el nuevo y yo me siento rodando los ojos, otro imbécil, ¡qué bien!
—Me llamo Josh, encantado guapa—dice insistiendo.
—Yo Kylie, encantada—digo sin mirar y saco mis cosas porque la clase va a empezar.
—Bueno antes de empezar, vamos a felicitar a Kylie por habernos salvado y haber echo un gran trabajo—dice el profesor y todos aplauden. Estaba muerta de la vergüenza pero yo también aplaudí mientras daba las gracias.
—Bueno comencemos...—y el profesor empezó a explicar, creo que ya llevaba 15 minutos y yo me estaba cansando.
—Oye—escucho a mi lado.
—Dime—me giro con pesadez.
—¿Tú eres la heroína esa que le disparó a los terroristas?—pregunta Josh, creo que no podían ponerme a alguien peor a mi lado.
—Primero que todo no soy una heroína, y si, puse en práctica cosas que llevo estudiando años—digo mientras le miro, la verdad es que es muy guapo pero lo que tiene de guapo lo tiene de tonto, y no llevo ni una clase con el.
—¿Y para qué estás estudiando? ¿Qué carrera vas a hacer?—vuelve a preguntar.
—Yo creo que hoy puedes dormir sin saberlo—digo rodando los ojos y dándome la vuelta, no es que sea borde pero me había cansado.
—Eres difícil eeh, tranquila, ya caerás en mis encantos—es lo último que escucho después de yo decir un "ya quisieras".
Por fin suena el timbre y todos salimos de
la clase a tomar el aire en el pasillo ya que, ahora nos tocaba en la misma clase.
—Bueno Kylie, cuéntanoos, que te hemos visto hablando con el nuevo—dice Eva poniendo cara pervertida.
—Eva, se llama Josh, y es un imbécil, ni me había sentado y ya me había llamado preciosa.
—Buenooo, eso es un gran paso—doce Mireia y yo la fulmino com la mirada.
—Pues está muy bueno—dice Myriam mientras lo miran todas a lo lejos como buenas cotillas.
—Y qué lo digas—responde Claudia.
—Bueno dejad al chiquillo en paz, a ver si en su primer día le vamos a acosar—dice Cam y yo le doy la razón.
Seguimos hablando hasta que viene la profesora y seguimos dando clase hasta que suena la hora del recreo.
El director me llama a lo lejos y voy hacia él.
—Hola Kylie, ¿qué tal?—me pregunta.
—Pues muy bien gracias, ¿necesita ayuda?—le pregunto ya que me ha llamado.
—Sí, verás, vamos a hacerte un homenaje ahora en el recreo y era para que estuvieras preparada nada más, nos vemos—se despide y yo me marcho a dónde siempre estamos todos los chicos y chicas de nuestro grupo, ¿ahora qué?.
Cómo tenga que hablar delante de todo el instituto me muero ahí mismo.
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Espero que os esté encantando y siento no subir tan seguido, ya es casi verano y no tengo mucho tiempo.
besos💘.
S✨

𝑃𝑜𝑟 𝑚𝑖Donde viven las historias. Descúbrelo ahora