Hold My Hand (Hawks)

Capítulo Siete

Estaba en mi apartamento, con el periódico en la mano y varias lapiceras regadas en mi mesa de escribir, mi objetivo:

Buscar trabajo.

El reposo que me ordenó el doctor ya había finalizado y yo no podía vivir de la gracia del espíritu Santo o esperar una lluvia de dinero, si no quiero quedarme en la calle, debo elegir un trabajo.

Nadie dijo que ser adulto sería tan difícil, crecer es abrumador y para nada es color de rosa, sin embargo es necesario.

- ¿Cuidar gatos? - Recordé lo mucho que me gusta los gatos, pero también mi alergia hacia ellos. - No, definitivamente no.

- ¿Repartidora de pizza? - me lo pensé unas seis veces y negué con la cabeza, seguramente sería de esas empleadas que antes de que llegue la pizza a su destino ya me la haya comido.

- ¿Mesera? Mmm... - No sonaba mal el anuncio del periódico, era medio tiempo y ya tenía experiencia.

Trabajo de mesera voy por ti.

Anoto la dirección del local en un papel, y me alisto rápido, algo casual pero formal, la primera impresión es la que cuenta.

Salgo de mi edificio, el clima era agradable, así que no me preocupo por llevar una chaqueta extra. Le hago una señal a un taxi para que se detuviera pero siguió de largo.

Gruño por lo bajo, intento otra vez y lo único que se detuvo fue la micro pública, no tuve más remedio que montarme.

El transporte estaba lleno de personas, parecían juguetes de niño en una caja guardada, apenas podía sentir mi aliento, lo que si podía sentir era el sudor de la persona al lado mío.

Que desagradable...

Al terminar mi lindo paseo por la micro, me bajo velozmente, suspiró cuando tocó la acera y siento el aire puro venir a mi. Saco el papel de la dirección de mi bolsillo y busco el negocio.

- Buenos días señorita - Un héroe pasa por al lado mío y me saluda, correspondo el saludo con una sonrisa y el mismo gesto. Sigo caminando y veo el local, era de comida tradicional y se veía lujoso, trago saliva, entro decidida.

Cuando entro formó una O con mi boca, ¡Que lugar tan grande! Nunca había visto un restaurante tan enorme, paso por las mesas y veo a personas comer mientras hablan animadamente, también pude sentir varias miradas.

Me dirijo a recepción, una mujer muy sonriente me dedica una mirada.

- Hola ¿En qué puedo ayudarte? - Hago un pequeña reverencia.

- Vine por el anuncio del periódico - Respondí nerviosamente.

- ¡Claro! Haz la fila que está a mi derecha y espera a que te llamen - Dice mientras me señala y veo a diez personas aproximadamente hacer la fila.

Es un negocio saturado - pienso, suspiró por mis pocas posibilidades de trabajar allí.

- Nunca vi muchas personas para trabajar de mesera - Dije intentando sonar casual.

- Yo tampoco, pero es de esperarse - Respondió indiferente.

- ¿Por qué es de esperarse? - Pregunté.

- ¿No lo sabes? - Me devolvió la pregunta confundida, ella vio mi expresión y supo la respuesta - Este es el restaurante del señor Hawks, fue recientemente inaugurado

¡Oh vaya!, ¡las coincidencias son una mierda!

- Ya veo - Dije para salir de allí rápidamente, pero varias personas se me acercaron me miraban desde arriba y abajo, oí susurros entre ellos