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CAPÍTULO DOS ❝ INVADIDAS POR EL PASADO ❞
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El primer día de escuela para Leah siempre era el más terrible de todos pues algo tenía con esos días que siempre le ocurría cosas malas; por ejemplo en su primer día de secundaria su hámster había muerto, el primer día de segundo año de secundaria había tomado por error la mochila de Polly, y Polly la suya, les fue un embrollo volver a cambiarla pues Leah aún estaba en secundaria y Polly ya estaba en primero de preparatoria. Primer de tercero de secundaria Jason y ella se habían quedado dormidos haciéndoles imposible asistir. El primer día de primero de preparatoria, había perdido a su mejor amigo y el primer día de segundo de preparatoria la llanta de su auto se había pinchado.
—¡Maldito primer día de clases!—Gruñó pateando la llanta pinchada con su bota.
—Leyley, no hay necesidad de enfadarse. Eso tiene arreglo.—Masculló Cheryl tomando las manos de la menor antes de que se empezara a jalar su cabello.
—Es que no lo entiendes, C. Esto no es por la llanta, sé que tiene arreglo. Son estos malditos días que se repiten como un gran karma.—Bufó.—No hay un solo primer día de clases que nada malo me pase. Por eso no me gusta venir.
Cheryl rió por la pequeña rabieta de su novia acomodándole la chaqueta de cuero color amarilla que traía.
—Sé que no querías venir, pero debías hacerlo. Tienes asuntos que resolver con el director Weatherbee antes de que pierdas tu puesto en el equipo de basquetbol.
Por ello también rodó sus ojos. Ya había otra cosa mala que había ocurrido en su primer día de clases y resultó ser que Leah debía estar temprano en al escuela para una junta que tendría con Weatherbee para resolver el asunto de sus materias y calificación, pues estas habían bajado mucho. Y eso era grave ya que si no se arreglaba sería sacada del equipo de basketball y le quitarían su beca para ir a Princeton en dos años.
—Lo sé.—Suspiró por lo que Cheryl besó sus labios. Sonrió ante ello.—Vamos, reina Vixen.
Subieron las escaleras y entraron a la escuela, tan pronto lo hicieron se encaminaron hasta la oficina del director Weatherbee. La recepcionista pasó enseguida a Leah mientras que Cheryl se quedaba afuera sentada en una de la sillas que estaban ahí.
