Epílogo

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Ya han pasado varios años desde su partida, y sigue doliendo como no tienes idea.

Se había alejado de Konoha y de las demás aldeas, no quería tener problemas así que huyó escondiéndose en las montañas junto al cadáver de su amigo, le hizo un pequeña tumba junto con lo de su hermano y padres, como lo había hecho antes en su patio.

Se entretenía cazando o jugando con los pequeños animales del lugar, no tenía a nadie, estaba solo sobreviviendo a la vida como siempre lo hizo, pero esta vez sin ayuda de sus compañeros o de alguien al mandó.

Bueno, solo una persona sabía de su localización, y esa era Karin, gracias a ella se mantuvo al contacto a lo que pasaba en el mundo Shinobi y sabía que pronto comenzaría la guerra, le ofreció quedarse con él, pero se negó, ella dijo que ayudaría a los ninjas a pelear, pero si las cosas se ponían feas irá sin dudar con él.

Estuvo tentado a ir a ayudar, pero conociéndolos no confiaran en él, después de todo tenían todo el derecho hacerlo, él causó muchos estragos y era buscando a pena de muerte. Y estaba seguro que cuando termine le podrían bajo las rejas, y no quería eso apesar que lo merecía.

Pero no tuvo opción cuando Karin llegó suplicando que los ayude, y él no podía negar se, le debía mucho a esa chica que eso era lo mínimo que podía hacer, aunque aún odiaba a Konoha, lo iba hacer.

Lo que nunca se imagino fue ver a Oruchimaru ayudando también, fue una sorpresa tremenda, Karin se rió al ver su cara, él solo bufo mirando molesto a la peli-roja. Pero gracias a esa acción las personas se le quedaron viendo.

Kiba casi se le lanza encima gritándole un sin fin de insultos, pero lo que más le dolió fue que le hecho a la cara la muerte de Naruto, actuó indiferente cuando en su anterior se sentía fatal, su compañera lo notó defendiéndolo del Inuzuka, él le recriminó porque ayudaba a un asesino, y eso era verdad, se merecía que lo tratarán así, el era un maldito asesino pero apesar de eso, la joven seguía creyendo en él, y lo agradecía un montón, porque gracias a ella no se sintió solo y le ayudó poco a poco con la muerte de Naruto, no se merecía a una amiga así, porque con el tiempo Sasuke comenzó a verla como una.

Kiba estaba tan enojado que le dio una cachetada a la joven, y le iba a dar otra si no fuera que él lo detuvo, el lugar se quedó en silencio recibiendo las miradas asombradas de los presentes.

- Suelta me Uchiha - gruñó mirándolo con odio.

- Tú aléjate de ella - apretó con fuerza su brazo causando dolor en el Inuzuka, lo soltó girándose a ver a su compañera acariciando su mejilla - ¿ Estás bien ? - susurro preocupado, no iba a permitir que dañaran a la única persona que tiene como amigo, no pudo hacer nada por Naruto, no volvería a cometer el mismo error.

- Sí, solo fue un pequeño golpe - le sonrió tratando de calmarlo, agarró su mano y lo llevo junto a Oruchimaru que estaba al lado de Suigetsu que miraba sorprendido la escena.

- Vaya, vaya. A los años que te dejas ver Sasuke -

- No lo molestes Suigetsu - regañó la peli-roja, mientras Oruchimaru le sonría.

Le pusieron al día de lo pasaba, trato de trabajar con los demás pero aún seguía incómodo por las miradas que recibía, pues lo estaban vigilando para ver que no hiciera nada.

Oruchimaru propuso revivir a los Hokages para que lo ayudarán en la pelea, pues hasta las justas resistían los ataques, en esas peleas pudo conversar con su hermano y le contó la verdad de lo que pasó, fue uno de los reencuentro más emocionantes.

Karin le propuso traer el cuerpo de Naruto para que se una a la lucha, y  hay cuando lo vio, conversando con su padre y sus amigos, Karin lo alentaba a ir donde él, y cuando iba a dar el paso a su dirección, las miradas de advertencia de los demás lo detuvieron, se fue por la puerta tratando de quitar esas miradas, su amiga fue con corriendo a su dirección ante la mirada de Naruto que se giró para ver como Sasuke y la peli-roja se marchaban.

También iba a ir pero sus amigos le detuvieron, diciendo que no era buena idea, como pudo se liberó de ellos para buscar a Sasuke, él sabía que Sasuke se lamentaba de su muerte, no por nada estuvo viéndolo desde el cielo y necesitaba hablar con él para resolver las cosas.

Lo vio sentado junto a la peli-roja que le acariciaba su cabello diciéndole algo que no alcanzo a escuchar por estar concentrado viendo como se trataban, sabía que la chica era la única después de él a quien consideraba amigo, pero no pudo evitar sentir mal y enojado al verlos así.

Y estaba celoso, lo admitía, se dio cuenta que estaba enamorado de ese emo vengador, por eso se esforzó como nunca en tráelo de vuelta, porque era su amigo y la persona al cual amaba.

- Sasuke, ni hola viniste a darme - el azabache se volvió asombrado, no se esperaba que viniera a hablar con él, pues él supuso que lo odiaba.

La peli-roja al ver la situación golpeó su brazo despertándolo de su sorpresa para sobarse a dolorido para mirar mal a la chica que se rió levantándose de su lugar para irse y dejarlos solos.

- Traidora - murmuró siendo escuchado por el rubio, ella sabía que no estaba preparado para hablar con él y lo deja solo, después se iba a vengar.

- Y Sasuke, ¿ Cómo va esto de la guerra ?- dijo sentándose a su lado, pudo ver como levemente temblaba.

- No muy bien, no tenemos mucha esperanza de ganar - soltó un suspiro tratando de controlar los latidos desesperados de su corazón.

- Eso es muy malo, deben estar más preparados, no podemos dejar que ellos ganen - Sasuke solo asintió sin saber que más decir.

- Naruto...Yo ..-

- Tranquilo Sasuke, no te odio, solo te dejaste llevar por tu locura -

- Pero deberías, lo único que te cause son problemas. Hasta moriste por mi culpa ... - agachó la cabeza arrepentido, no podía creer que apesar de todo no lo odiará, no se merecía tenerlo como amigo.

- No importa cuanto lo intente, no no puedo hacerlo - sonrió acariciando su suave cabello azabache, se sorprendió un poco al sentir como lo abrazaba con fuerza mientras sentía como mojaba su cuello, así que correspondió abrazándolo con la misma fuerza.

Siempre había soñado volver a tenerlo a su lado, y su sueño se volvió realidad, debía dar gracias a Karin por esa idea, así que conversaron tratando de recuperar el tiempo perdido, lastima que fue interrumpido por una alarma, estaban siendo atacados.

Habían podido ganar la guerra gracias al sabio de seis caminos, y llegó el tiempo de despedirse, los amigos del rubio no le dejaron acercarse a él durante todo la guerra pero Naruto los regañaba al hacer eso, estaba llorando al ver como el rubio se iba pero antes de desaparecer ante la mirada de todos beso al azabache dejándolo congelado y susurrando unas palabras que hizo sonrojar.

- Te estaré esperando mi Teme -

Fin

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