Cap 1: Luz y Firzu

88 3 0
                                    

Postes de luz están corriendo en una ruta de concreto y barro.

A lo largo solo se puede apreciar oscuridad, pasto y vegetación nocturna.

Él está jugando con la Game Boy vieja que le regaló su tío en recompensa por ayudarlo en el kiosco la semana pasada, va con el aparatito pegado a la ventana del auto, creo que es la única forma que tiene de iluminar esa pantallita tan pequeña y pixelada, aunque sea por unos segundos.

La Game Boy se apaga, y el chico ya agotado por el frío de la noche, coloca su almohada de spiderman atrás de sus pelos revueltos, y lentamente empieza a caer en un profundo sueño esperando llegar a destino.

En la oscuridad de un cuarto lleno de libros, e iluminado por nada más que una vela a punto de terminarse su, alguien abre un libro pesado y amarillento, debe tener un cien años piensa, "como llegó esto a casa?" se pregunta

Libro 1 página 1:
"Hablando de Magia Año 2020"

"La magia... cualquier persona a la que le hablas de magia de forma seria seguramente te esquiva... te dicen:

"Es todo ficción.." o "Pregúntale a tu amigo Harry Potter.."

.... yo no creo así, yo creo en la magia, es...mi secreto más vergonzoso, la gente me vería como un loco si les hablo seriamente de esto, por eso me abstengo de narrar sobre mis creencias a la gente, yo sé que algún día seré un gran mago!"

La persona que leía el libro, también cansada por el frío de la noche al igual que
nuestro amigo de la almohada de Spiderman, cierra el libro y procede a dormirse entre sus peluches.

Firzu se despierta y mira hacia la ventana apreciando caserones viejos y una que otra casa siendo remodelada, familias ricas en un pueblo que no lo es.

Pero había algo más, algo que llamó notoriamente la atención del pequeño, un gran bosque a lo lejos que se veía muy seco o quizá muerto, y al lado la posible causa de que este muera, la tubería de metal por donde caen desechos de fabrica....

Firzu tenía ya la mejilla fría de mirar a la ventana. De pronto encontró otro motivo  para seguir mirando, una pequeña flor había nacido, parecía que bailaba, que estaba felíz, que reía al ver a su padre el sol, que tanto cuida y protege de ella, al igual que los demas seres vivos.

"Deben ser los primeros rayos de luz" -pensó.

"Quizás tengo sueño" -pensó....

Y Firzu volvió a dormirse..

- Antes no habían tantas casas! - exclamó mi padre, despertándome...

Bajé del auto y estire los brazos, había un poco de viento, así que antes de cerrar la puerta me puse un abrigo. Uno de mis primos bajó del otro auto donde viajaba con mi tio y con mucha energía me abrazó como si fuera una gran bolsa de papas y me llevó situándome en frente de la parte trasera del auto.

- Ayydame cargando estos bolsos que son menos pesados

- Porque siempre me encargan lo menos pesado?

Porque sos el mas joven de la familia, y esos bolsos son ligeros - respondió mi primo.

Con eso excusa más que tonta, terminamos a las once de la mañana de desempacar, apenas dejé el último bolso corrí directo a la puerta y me metí a la casa que estaríamos unos meses, sin que mi padre se diera cuenta, recorrí cada rincón de la casa, incluso me topé con algo similar a una ardilla, mis mayores enemigas, no me gustan las ardillas, mucho menos los conejos, prefiero otro tipo de animales, los perros me parecen bien.

CanterpísteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora