Al filo del abismo

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Sugeyri

Oh carajo.

Veo como Venus desaparece entre toda la gente y en seguida me levanto para ir detrás de ella pero Cansas me toma por la muñeca.

-Hey aguarda -me dice -explicanos lo que acaba de pasar.

-Demonios -me siento de mala gana -Hace ocho años falleció la mamá de Venus, creo que eso todos lo saben -Eider me mira confundido -bueno, casi todos.

-Aja... -habla Gael -¿y luego?

-Lo que pasa es que... Carajo, solo yo sé esto; Vanus iba con su madre, ella iba en la parte trasera, su mamá iba viendola por el reflejo del espejo cuando de repente se apareció este mercury negro, trató de cambiar de carril pero el mercury hizo lo mismo, Venus me contó que a pesar de que todo sucedió rápido y tan solo era un niña recuerda claramente como el conductor del coche con el que impacto iba viendo otra cosa y no al camino -miro a Eider -su madre por tratar de sujetar a Vi en un abrir y cerrar de ojos se desabrochó el cinturón y puedo evitar que Vi no saliera del coche pero por lo contrario ella fue la que salió disparada de él.

-Rayos -escucho que dice Madi.

-No puede ser -veo como Eider se sorprende al escuchar esto, como si lo hubiera olvidado.

-Ahora, si me disculpan -me levanto.

Le planto un beso a Gael, doy media vuelta y comienzo a caminar hacia la salida, trato de buscar con la mirada a Vi pero no logro verla por ningún sitio.

Para Vi el tema de su madre es algo que no puede olvidar, primero que nada porque por culpa de alguien más la perdió y en segunda que gracias a la perdida de su mamá, su papá se volvió un alcohólico.

Aún recuerdo la noche que llegó a mi casa llorando, con toda la cara hinchada de tanto llorar, estaba desecha y entre sollozos me dijo que su padre había tratado de sobrepasarse con ella. Esa noche se quedó conmigo; lamentablemente al siguiente día su papá la fue a buscar, el mío lo amenazó de que si le ponía una sola mano encima se pudriria en la cárcel, creo que le quedo bien claro porque nunca más sucedió esto.

Vi es parte de mi familia casi, casi desde que nació, nuestras madres eran amigas desde antes de que nacieramos, se podría decir que nos criamos juntas. Ahora ella solo espera el cumplir la mayoría de edad para poder salirse de su casa, nosotros me hemos ofrecido que se venga a vivir a nuestra casa pero rechaza rotundamente la oferta sin si quiera pensarlo.

Carajo.

Veo a Karla en el portón con el teléfono, olvide por completo que hoy le toca a Karla cuidar quien entra y sale del instituto.

-Hey hola -la saludo con una media sonrisa.

Levanta la vista del celular y lo deja sobre la mesa en donde se encuentra el interruptor que hace que se abra el portón.

-Acaba de salir, se veía mal... -dice con una mirada preocupada.

Karla ha sido una gran amiga para las dos desde que entramos al instituto, primero se hizo muy buena amiga de Venus, eso fue algo completamente raro ya que ella no se abre casi con nadie, pero con ella congenió y luego fue cuando yo empecé a entablar una amistad con ella.

-Lo sé, ella no esta bien -miro al interruptor -¿puedo salir?

-Faltan diez minutos para que entren a clases, las quiero acá en cinco -después de esto oprime el interruptor.

El portón se abre pero no del todo. No nos tienen permitido salir del instituto hasta la hora de salida, a menos que tengamos clase de biología, ya que tenemos que salir al invernadero; pero Karla nos ha apoyado en algunas cosas sobre esto.

El instituto cuenta en la parte de afuera con un jardín extenso aparte del estacionamiento claro, a unos cuantos metros se encuentra el invernadero. Corro lo más rápido que puedo hasta el, empujo la puerta y la veo ahí sentada. Tiene en sus manos un cigarrillo.

-¿De dónde sacaste eso? -me río y se lo quito de la mano -si te llegan a cachar con eso te suspenden del instituto.

-Me importa un carajo lo que hagan -me dice tratando de volver a tomar el cigarrillo.

No lo permito, lo tiro al suelo y lo piso; me siento junto a ella al borde de unos escalones que se encuentran dentro.

-Deberíamos entrar, están apunto de dar el toque para retomar las clases.

-Sabes que a mí no me importan las estúpidas clases -me dice pasándose una mano por el cabello que le cae sobre el rostro.

-Eso lo sé Vi, pero tan solo ponte a pensar en el problema en el cual meteriamos a Karla si nos llegan a encontrar aquí.

Se queda callada un par de segundos mirando a la nada, luego me voltea a ver y pone una expresión de fastidio.

-Mierda -dice sin más y se levanta.

-Vamos -pasa por mi lado y comienza a caminar -¿estas bien? Sabes que conmigo puedes hablar lo que sea.

Es muy difícil que Vi saque sus emociones, poco a poco se fue convirtiendo en una chica dura, no la he visto derramar ni una sola lagrima después de lo que pasó con su padre.

-Sabes que no, el tema de mi madre siempre fue algo muy sensible para mí -me mira -y ahora que se quien fue el idiota que ocasionó el accidente, me tiene al filo del abismo.

-Vi, ya ha pasado demasiado tiempo de esto -después de que salen estás palabras de mi boca me arrepiento -aparte, ponte a pensar que Eider era un niño y aprendió la lección, obtuvo su merecido también...

-A costa de la vida de mi madre.

Mira el reloj en su muñeca y se encamina hacía la salida, gira a verme y me hace un gesto para que la siga.

Corremos por el jardín y vemos a Karla asomándose para buscarnos, en cuanto nos ve su gesto pasa de uno de preocupación a uno de alivio.

-Vamos, vamos, están apunto de llamarlos -nos empuja hacía dentro del instituto.

En cuanto entramos escuchamos el toque, nos despedimos de Karla y me agradecemos por habernos dejado salir. Caminamos hacía el aula, en cuanto llegamos nos dimos cuenta de que la profesora ya nos estaba esperando.

-¿Podemos pasar? -le digo un poco nerviosa.

-¿Cuál es su motivo al llegar tarde? -dice ella.

-Que le importa -suelta sin más Venus y todos la miran.

-¿Perdón? -camina y se postra frente a nosotras.

-Que le importa entrar a su clase, que si nos permite entrar -le digo a la profesora al notar las intenciones de Venus.

-Pasen -finalmente accede.

Entramos y nos sentamos, cada una en su lugar, las chicas nos miran y Eider parece estar preocupado por Vi, ella ni si quiera le dirige la mirada.

Carajo. Este ciclo escolar será un completo desastre...

VENUSDonde viven las historias. Descúbrelo ahora