La vida de adolescente de Arthur Kirkland. Hetalia

Parte 159

-Hola, Arthur.- Matthew te saluda con timidez desde el reflejo del espejo que esta frente a los lavamanos.

Si realmente te ha encontrado por casualidad cuando justo Lukas y Vlad se han separado de ti para hablar con Emma, no sabes y prefieres no pensarlo mucho.

-Hola, Matthew.- Ustedes no han interactuado más allá de los saludos desde que es oficial que estas con Alfred y que Francis es tu amigo. Todos los encuentros que habían tenido a lo largo de la escuela, fueron evitados fácilmente por la intervención de sus amigos y la obvia incomodidad de ambos. Desde que Alfred te había puesto del corriente de lo que pensaba Matthew que habías o no hecho, te habías mantenido en tono cordial con él, aunque no por eso menos incómodo. - Si... bueno... Que tengas un buen día. – Das un asentimiento a su dirección, e intentas salir del baño antes de que esto se vuelva aún más incómodo.

-¡Espera, Arthur!- Maldices por dentro y te regresas para mirarlo.

-¿Si?

-Yo solo...- te recargas contra el lavamanos y esperas con los brazos cruzados que hable. – Asumo que Alfred te dijo lo que mencione sobre ti, ¿no? - Alzas una ceja.

-¿Qué me fui a contarle el chisme sobre Francis y tú?- Asiente apenado.

-Podríamos decirlo así, sí. - Baja la mirada y mira sus pies. - Lo siento, no debí decir eso, no te conozco y no puedo asumir cosas sobre ti. Gracias por no decir nada.

-Francis me pidió que no lo hiciera. - Aclaras con una mueca, porque tampoco está bien dejar que piense que tu solo te callaste, cuando la realidad es que estabas curioso por ellos. Además, en ese entonces no sabías que tipo de parentesco tenían. El regresa la mirada a ti.

-De todos modos, gracias. - Su tono es sincero, tu murmuras un "de nada" y sales del baño para reunirte con tus amigos.