Del día que nos conocimos hasta hoy... y nuestro futuro.

VI

Continuación del capitulo IV, por si necesitan refrescar memoria.

Del día que nos conocimos hasta hoy... y nuestro futuro.

El silencio se instaló en las habitaciones del hombre, como la brisa de invierno que se cuela por las grietas de una ventana, helado.

Aun esperaba una respuesta de su estudiante por lo que no se movió ni un poco.

—Te dije... estaba enojado. Comenzó gritándome —intento explicar. El mayor lo esperaba, aunque no fuera de lo más detallado en el momento, Severus necesitaba una respuesta—. Me empujo un poco y después fue la cachetada; las cosas empeoraron después de eso. Todos gritaban, mama le pidió que se detuviera y Sirius lo separo de mi antes del puñetazo. En algún momento de la pelea choque con la mesa empapándome, en la caída creo... creo que fue en ese momento que me lastime la muñeca... —una serie de lágrimas silenciosas comenzaron a brotar de sus ojos. ¿Cuántas lagrimas era capaz de soltar el ser humana hasta llegar a un cese total? "...ES FRUSTRANTE..."—. Yo... yo lo siento... esto es mi culpa... se enteraron por mi culpa y aun así... aun así estoy aquí y.... Lo siento, lo siento, lo siento, lo siento... —murmuro repetidamente sin poder controlar más su llanto.

Severus apretó labios y ojos conteniendo la ira junto con las ganas de ir a matar a Potter de la manera más dolorosamente muggle posible. No podía darse ese lujo, Harry lo necesitaba ahí.

—No es tu culpa, nada de lo sucedido es tu culpa. Cualquiera que fuese el motivo de su enfado no es justificación —dijo de la manera más tranquila de la que fue capaz. Froto los brazos del menor con un poco de fuerza en muda señal de estar ahí solo para él.

—No lo entiendes Sev... Fue mi culpa, si no hubiera estado jugando con el... ¡Oh Severus! Lo lamento tanto, intenté detenerlo, que no lo destruyera, pero no lo conseguí —el llanto continuo al término de su disculpa, completamente abatido y dolido, como si esa pérdida de 'eso' fuera más importante que sus propias heridas.

El profesor no entendió de inmediato que podía ser tan importante para iniciar una pelea tan fea al punto de llegar a los golpes con su padre. Antes de siquiera preguntarlo, el menor abrió la mano que sostenía de la muñeca, rebelando un aro carbonizado. La compresión lo golpeo como balde de hielo.

—Lo traía puesto. Conseguí ocultarlo la mayor parte de las vacaciones, pero hoy... Me sentía triste de no poder celebrar juntos, así que me lo puse por un rato; en cuanto llegaron los Weasley olvidé que estaba ahí. Se sentía tan natural que no me percate de algo ajeno a mi mano. Los problemas llegaron una hora antes de la cena —suspiro temblorosamente aun derramando lágrimas—. Los gemelos lo notaron y comenzaron a molestarme sobre esa novia secreta, juguetearon a quitármelo, pero sin las intenciones de lograrlo. Luego apareció Ginny, sostuvo mi brazo arrancando el anillo de mi mano, y leyó la inscripción en voz alta, en ese punto todos estaban a la expectativa. Por un minuto pensé que no tendría que dar mayor explicación ya que nadie parecía entenderla... hasta que papa se lo quito y leyó el mismo.

Snape tomo lo que una vez fue un anillo y una buena idea de regalo, completamente inservible. Ahora sabia lo apresurado que fue. En algún momento los Potter tendrían que saber que los sentimientos de Harry eran mutuos y no unilaterales como siempre intento mostrar; pero no así, no tan pronto y menos esperaba causar una reacción de tal magnitud. Se sentía más que culpable.

—Es solo un anillo, pequeño... es reemplazable, tu no —apretó el objeto en su mano terminándolo de convertir en cenizas.

—Era más que eso. Era la promesa de un futuro juntos y ahora...

—Y ahora esa promesa sigue en pie. El anillo fue solo la representación física de esa promesa —acaricio gentilmente la mejilla maltratada una vez más antes de abrazarlo en comprensión. "Con o sin anillo" —. Sigues siendo la próxima Lady Prince —sonrió al recibir un codazo del contrario, odiaba ser llamado "Lady Prince" no por el apellido, pero si el mote de mujer. Un poco más calmado se separó de su profesor.

—¿Entonces no te vas a retractar por no poder cuidar de el? —mordió su labio haciéndolo sangrar un poco en el proceso.

—De lo único que me arrepiento es de no poner hechizos de protección y un encantamiento de 'no me notes' hasta tu décimo séptimo cumpleaños. Eso no volverá a pasar, así podremos tenerlos todo el tiempo —Harry sonrió en aprobación. Definitivamente sonaba mejor 'anillos de compromiso' que 'anillo de compromiso'. Desgraciadamente el alivio no llego al profesor, los Potter podrían hacer cualquier cosa con la nueva información y eso lo aterraba de sobremanera—. Vamos a limpiarte esa bonita cara.

Lo se era para ayer pero estuve  muy ocupada, pensé en publicarlo junto con el 7 el próximo domingo, lo cula no me gusto de todo dejarlos sin un cap por muy corto que sea. 

El siguiente no se que tan largo salga pero si mas que este y el 8 si estará largo (a comparación de uno normal)