El inicio del demonio

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Aunque ya había quedado atrás el lugar donde su vida se había arruinado decidió no cambiar su actitud reservada y apartada de los demás todo por no creer en el cariño y afecto de otras personas.
Ahora en los dominios del reino del este comienza su nueva vida escolar y laboral para mantenerse y sobrevivir si es que apunta a algo mejor que solo un simple estudiante. Entrando a 9no año escolar teniendo 16 años se presenta a clases como todos, aunque en esta ocasión algunos sigue murmurando acerca de el aunque la mayoría de comentarios son porque quieren saber de él o acerca de el, los maestros le piden su opinión y comentarios acerca del tema pero como era de esperarse nadie se arma de valor para afrontarlo y hablar con el.

Un día en particular Wade se encontraba trasladándose a su siguiente clase y mientras caminaba por el pasillo se encontró con 3 sujetos que al verlo no dudaron en acercarse:
– Oye –comenzó argumentando el que parece tener mayor edad– ¿hiciste el reporte de educación doméstica amigo?
Wade intentó pasar a su lado sin hacer caso al comentario, sin embargo los otros 2 lo sujetaron para meterlo a un baño.
– Entonces qué ¿vas a pelear o te quedarás para recibir los golpes?
Wade decidió no responder, ni siquiera se molestó en mirarlos a los ojos puesto que no tenía interés en hablar o dirigirles la palabra.
– Muy bien, ¡Sujetenlo bien! – ordenó en voz alta a sus acompañantes –.
Estos lo tomaron por los brazos y de pronto su líder se precipitó a dar el primer golpe pero a escasos centímetros de dar en la cara de Wade este inmediatamente lo pateo con ambas piernas en el abdomen y prosiguió a safarse de los otros 2 sujetos y ni corto ni perezoso golpeó fuertemente a cada uno en la cara para finalmente darle otro golpe en la cara a su líder y posteriormente abandonar el lugar caminando como sí nada hubiera pasado. El día transcurrió normal hasta que un profesor llamó a Wade con el director; al llegar a la oficina se encuentra con los tipos que lo intentaron golpear y el mismo director, este último comenzó a estructurar sus argumentos:
– Te mandé llamar porque estos 3 jóvenes dicen que tu los golpeaste sin razón aparente ¿es eso cierto?
Pasa un breve momento de silencio en los que Wade piensa como responderá ante esa forma de inculparlo hasta que por fin usa su carta.
– Si lo hice, pero sí yo quisiera golpearlos en serio las marcas que trae cada uno de ellos hubieran sido más graves –dice sin que su expresión seria y centrada cambié–, soy consciente de que la violencia no es buena pero ¿debo quedarme de brazos cruzados y dejar que entre 3 flojos que son incapaces de hacer sus propias tareas vengan a intentar quitarmela a golpes?
Esto último hace que el director miré con seriedad a los acusadores que están a punto de convertirse en acusados.
– Entonces ellos te atacaron porque querían tu trabajo ¿no es así? Pero tú no resultaste herido.
– Así es, mi padre era de la guardia imperial pero me enseñó un par de cosas aunque nunca me ví en necesidad de usarlas y una de ellas fue librarme de tipos como estos.
– Entiendo –dirige una mirada con desdén a los 3– entonces ustedes tienen bien merecido que los golpeen, no traten de ocultar sus propias faltas y solo decir la de los demás. Por lo tanto ustedes pueden retirarse definitivamente de aquí y usted señor Wade puede regresar a su clase, ahora.
Todos inmediatamente obedecieron, al salir Wade se fue sin mirar a otra parte más que hacía el pasillo, mientras que el líder de los 3 lo miró a sus espaldas con odio y deseos de venganza, pero algo que no sabe es que está a punto de jugar con un incendio.

El día transcurre normal hasta el momento de salir, Wade toma sus cosas y se dispone a retirarse a casa, mientras camina por las calles del reino hasta que mientras paso por el frente de un callejón 2 tipos lo sujetan y lo llevan al interior y oscuro camino paralelo del camino principal, estos lo arrodillan y se encuentra cara a cara con el líder quien se encuentra furioso.
– Ya viste lo que puedes hacer, pero tengo entendido como hacer que no te olvides de mi, esta vez sí te haré pagar – argumenta mientras saca una navaja de sus pertenencias –.
Inmediatamente se precipita a atacarlo pero Wade al tener cierto entrenamiento y fuerza consigue hacer que uno de quienes lo agarra se interponga y consigue safarse del agarre del otro, y prosigue a pelear contra los 3, cayendo primero aquellos que lo sujetaron quedando absolutamente inconvenientes por golpes tan precisos y tan fuertes de Wade y finalmente solo queda el de la navaja quien lanza constantes ataques sin acertar uno, tan sólo logró hacerle una cortada a Wade en el brazo derecho y este sin tiempo que perder se lanza para agarrar por el brazo a su contrincante y despojarlo de su arma haciendo que está caiga al piso y con una serie de golpes finalmente lo derriba, habiendo derrotado a sus oponentes Wade ve la navaja y la coloca en sus manos mientras tanto comienza a acercarse amenazador a su víctima.
– ¿De verdad creíste, en verdad eres tan tonto como para creer que podrías detenerme o intimidarme así? Lamento decirte que los que terminaron siendo intimidados son otros –mientras su presa trata de escapar– Te dijeron que perdiste allá, aquí yo te digo con mi propia voz: Perdiste.
Wade pisa con gran fuerza el tobillo de su presa esto para que el dolor agudo no lo deje moverse mucho y finalmente consigue alcanzar su pecho y se inclina amenazante con el arma de su enemigo.
– ¡No por favor! ¡Piedad! –exclama su víctima–.
– Lo lamento, pero ya se me acabó la piedad y la misericordia, dime ¿Qué es sonreír?
Finalmente clava la navaja en la boca de su víctima silenciandola para siempre y volteando amenzante y con su ya misteriosa seriedad mira a los otros 2 quienes todavía yacen en el piso y sin nada que demostrar se aproxima y les corta el cuello. Habiendo visto lo que hizo decide robar una carreta con algunas sábanas y unas sogas y volviendo a donde dejó a sus víctimas las sube a su transporte mientras las tapa con las sábanas y comienza a dirigirse a las afueras del reino donde se interna en el bosque y al encontrar un árbol bastante grande decide subir hasta una parte alta y colgar a sus víctimas en una parte alta para que todos crean que fue suicidio u obra de alguien más todo con el fin de lograr deshacerse de toda acusación. Finalmente corre a casa a darse un baño y quemar esas prendas, lo único que conservo fue la navaja de su adversario la cual tiene un gran atractivo para el, quien tras mirarse al espejo no consigue ver maldad sino otro ser humano común y corriente sin nada en especial, ni siquiera el mismo se percibe como malo o como el bueno.

El Jinete NegroDonde viven las historias. Descúbrelo ahora