-Lou... –entraba al castillo con pasos indecisos, de repente su mente le jugaba mal y le hacía recordar cuando llegó allí la primera vez. Todo era igual de solitario como al inicio.
-En el gran salón Hazz –su voz se escuchaba suave, como siempre que le hablaba.
-Lou, esta vez Richard no me ha recibido –hacia un pequeño puchero que Louis se contuvo de besar.
-Hazz hay una situación... –moria por ver la cara del rizado cuando mirara a sus amigos.
-¿Estás bien? No he visto a nadie ¿Dónde está todo el mundo? –se acerco lo más rápido que pudo a el mientras se quitaba uno de los abrigos que traía puestos.
-Quiero que conozcas a algunas personas –hablaba rápido por la emoción contenida.
-¿Personas? ¿Son... Son tus amigos? Creí que solo eran los que est... Zayn ¿Cómo estás?... ¿Zayn?... –el piano parecía una decoración más- solo no he venido un día y ya todo es diferente aquí, nadie me dice nada.
-Si tan solo me dejaras hablar... en realidad ya los conoces Hazz, es... esta vez será diferente –ignoro lo último que le dijo.
-¿Lo hago? –frunció el seño, nada estaba siendo normal en este día, comenzando porque Richard no lo había recibido contándole las mismas historias una y otra vez.
-Si lo hace Monsieur Bonette –hablo Niall detrás de él.
-Hola Ni... –volteo esperando encontrar el precioso candelabro y en lugar de eso encontró a un señor de casi su estatura con el cabello blanco en su totalidad, ojos azules y arrugas adornando su cara. Su sonrisa era contagiosa- ¿Señor Hardy? -no pensó que algún día esto ocurriera pero su corazón saltaba de alegría. Sus ojos azules eran como los de Lou, pero no tan bonitos.
-Siento no ser tan precioso como el candelabro de antes –bromeo un poco.
-Vaya tu... Eres –lo miraba de pies a cabeza tratando de memorizar su persona y así borrar ese candelabro de su mente- el es... –miro a Louis de reojo y después rio.
-¿Soy mucho mejor de lo que imaginaste?
-No... Eres tan viejo –reía mientras lo abrazaba, recordando de pronto que los demás deberían de haber vuelto a su forma humana. En ningún momento se cruzó por su mente la idea de que el encanto podía estar llegando a su fin.
-¿Quieres conocer a los demás? –intervino Louis.
-Claro que si –la sonrisa no se marchaba de su cara, justo como la Bestia lo había imaginado.
-Deben estar en la cocina, vamos –le ofreció su brazo para ir juntos.
-Alto –dejo de caminar y Louis se esforzó por no tropezar con sus pies- si para el resto el hechizo se rompió ¿Por qué...
-¿Por qué yo no soy humano? –habia estado esperando esa pregunta desde que lo tuvo enfrente- supongo que es distinto para mí –suspiro abatido.
-Oh... –bajo la mirada sin saber que hacer ahora. El señor Hardy se había ido, dejándolos en la puerta del gran salón.
-Harry –habia miedo en su voz- si esto nunca se acaba ¿Seguirás viniendo? –habia miedo en su voz porque no quería escuchar la respuesta, pero necesitaba hacerse una idea.
-Por supuesto que sí Lou –tomo lo que podía de sus manos llevándolas a sus labios y dándole un suave beso.
-En algún momento tendrás que irte Hazz, no serás feliz escondiéndote de todo el mundo –lo miraba directo a los ojos y podía ver lo que esas palabras le hacían al rizado, pero era la realidad. Su realidad.
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🥀EL ENCANTO DE LA BESTIA {LARRY STYLINSON}🥀
Любовные романыCuál más le llamaría loco, pero esa Bestia de ojos azules es más frágil de lo que creen. No hay explicaciones para esto, solo es amor. "Yo no soy una Bestia, pero por Harry estoy dispuesto a serlo" Todas las historias tienen su "felices para siemp...