TWELVE MONTHS WITH YOU ❘ Ray en su último año escolar, tiene un encuentro furtivo con Emma entrando el año, quien con una enfermedad que carga le quedan doce meses de vida, acepta ayudarle en encontrar algo de su lista, que es salir con ella, pero s...
Advertencia: de au, oo'c y tal vez contenido explícito.
Recuerdos - Flashback: cursiva
Presente u historia: normal.
Puntos importantes y entre comillas o con algún asterisco: negrita.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Enero.
Un año nuevo con el cual empezar, dónde pasas con tus familiares en las festividades, con tus amigos y parejas. El aire fresco por las temporada de invierno que aún estaba presente.
Pero este año, este año, año nuevo no es nada especial para mí. Después de todo, ¿qué es el año nuevo? Es la celebración del cambio del 31 de diciembre al 1 de enero. Pero, ¿qué hace que ese cambio sea tan único? Cada segundo que pasa es un momento de cambio. La persona que soy ahora es un segundo de vida diferente de la persona que era hace un segundo, porque no podía tener una vida normal como todos.
Este nudo que se hacía presente en mi pecho, al recordar que no será lo mismo que los años anteriores, no impedía mi comportamiento de antes, pero no puedo evitar tener miedo que no despertaré en cualquier momento o día.
Sus ojos de un cierto color olivo y carbón miraban su o-mikuji*, soltó un gran suspiro para abrir aquel rollo de papel demostrando lo que estaba escrito en el, relaciones amorosas (戀愛 ren'ai?), soltó un bufido, nunca creyó en estás cosas, porque hacerlo ahora, y tampoco es como si creyera en el amor.
—¿Qué te tocó, Ray?—, pregunto un joven albino que de le calculaban algunos diecisiete años de edad.
—Nada importante.— enrolló de nuevo el papel, pues creía que eso no era buena suerte al contrario pensaba que sería su fin, por eso decidió atarlo a un árbol de pino, que estaba en aquel templo.
Solo esperaba que esa mala suerte se quedará atada a ese pino.
Sin más se fue de ese lugar sagrado, sin importarle aquel tonto papel. Y las cosas ciertas que contendría.
Ciertos metros lejos de él, estaba cierta joven de cabellera extravagante y de un color llamativo, que sorprendería a todo mundo al igual que los ojos de un bosque profundo.
Quien miraba su o-mikuji, abriéndolo y para su sorpresa, tristemente, tenía razón.
Enfermedad (病気 byōki?), era lo que venía escrito en ese papel decolorido. Sonrió con tristeza, al parecer esto es lo que le depara el futuro y el nuevo año. Una enfermedad que la consumiera hasta morir.
No tenía sentido dejarlo en el árbol, después de todo era cierto, lo guardo para retirarse del lugar.
Sin saber que ambos tenían la mala suerte (凶 kyō?).
