Siento que las palabras se atascan en mis manos,
impidiéndome redactar con soltura,
mi cabeza dando tumbos no se acostumbra,
a esta crisis,
y a esta penumbra;
mi corazón cuenta mil historias,
pues mi cerebro se alimenta de sus sobras,
y, aunque luego trate de contarlas,
se me atascan las palabras .
'—Escribir es lo mismo que preparar Allvamia, cachorrillo, si no la haces con cariño, luego al saborearla sabrá a rayos.
— Azzel, El Tabernero Shilediano. —'