cursed; Kakashi Hatake [editando]

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“参加してください”

Nashiro Tayori

Todo era completamente negro, incluso llegué a pensar que había perdido la vista, debido a que no podía ver nada, literalmente nada, era un oscuridad profunda. Mi corazón latía velozmente y mi respiración era incontrolable.

— Nashiro —escuché esa profunda voz a lo que suponía que era mis espaldas. Sabía sin falla alguna quien era el dueño de aquella voz, tantas veces llegué a escucharla en el pasado. Algo dudosa intenté de buscarlo con mi vista, pero parpadeé un par de veces al notar la única luz dentro de toda esta oscuridad.

En realidad no sabía que es lo que estaba ocurriendo. No sentía mis piernas o alguna parte de mi cuerpo, solo sabía que me estaba aproximando hacia aquella luz.

— Itachi —murmuré en un hilo de voz, admirando la luz que emitía el Uchiha. ¿Donde estábamos? ¿Qué era este lugar y por qué él estaba aquí conmigo?

— No seré capaz de continuar protegiendo te. Lo siento tanto, Nashiro —sus palabras salieron débilmente y sus ojos volvieron a recordarme al Itachi que conocí desde mi infancia, del adolescente que me había enamorado.

— ¿D-De que..? ¿A qué te refieres? —cuestioné confundida sin saber a lo que se refería.

— He muerto —respondió cortamente.

Mis ojos se abrieron como trasto y mi labio inferior titubeó. Eso no podía ser posible. ¡Lo estaba viendo en estos momentos! Era una broma, ¿verdad?

Negué repetidamente con mi cabeza, sintiendo como mis sentidos se desconectaban de mi ser racional.

— Es un genjutsu, ¡el tsukuyomi! Ese hombre... —objeté con mis palabras siendo arrastradas. El azabache que tenía enfrente comenzó a negar con su cabeza repetidamente.

— Estás inconsciente —le explicó — yo... Yo le pedí a Kestuekimajo-baba una vez yo muriera pudiera dejarme hablar contigo por última vez, parece ser que me escuchó.

Un extraño ardor invadió mis fosas nasales, mientras sentía como mis ojos se aguaban y el temblor en mis labios era más evidente.

¿Hablar por última vez?

— Itachi —pronuncié su nombre con la voz distorsionada, intentando de contener el llanto — ¿de verdad dejaste que Sasuke terminara contigo? ¿Por qué? —me acerqué a él y le proporcioné suaves golpes a su pecho — ¿¡Por qué!? —chillé, sintiendo como mi llanto se desataba— BakaItachi —mascullé entredientes mientras mis manos se aferraba fuertemente al uniforme que solía a ocupar en su niñez.

— Porque ya lo había perdido todo —la voz de Itachi sale en un hilo de voz y con mis ojos nublados por las mismas lágrimas llevó mi vista hacia Itachi— mi familia, mi orgullo shinobi y al amor de mi vida —sus manos acunan mi rostro y sus dedos pulgares se encargan de limpiar mis lágrimas — en verdad siento mucho no ser el hombre por el que estuviste esperando, disculpame por no ser el hombre con el que deseabas compartir una felicidad inalcanzable—los ojos del Uchiha se cristalizan y su voz comienza a salir algo ahogada— a partir de ahora seré tu sombra, continuaré protegiendote sin que me notes, velaré cada una de las noches que no pude compartir a tu lado porque el amor que siento por ti ni la misma muerte podrá arrancarlo de mi ser. Lo siento, Shiro —sollozó y aproximó su pálido rostro al mió, haciendo que las puntas de nuestras narices se rozaran.

— ¿Por qué me dices esto cuando todo se ha perdido? —le reproché sintiendo un sabor amargo inundar mi boca— ¿Por qué cuando estoy enamorada de un hombre con el que deseo compartir hasta mis últimos momentos de vida?