Nadie sabe qué puede ser este escrito, si sólo es una página dentro de una aplicación sin sentido o si es un largo relato que podría seguir, algo que simplemente se me mete en la cabeza y no quiere salir...
Acarició las rosadas mejillas, pasando su dedo por el dulce y pequeño rostro, alzando la barbilla de la dulce infante.
—¿Estás mintiendo, pequeña?
Preguntó el hombre de gran altura a aquella niña que yacía en sus largos brazos mientras cepillaba el azulado y liso cabello, tan sedoso... La pequeña sacudió su cabeza de un lado a otro, negando.
—Me alegro, ya sabes lo que te espera si me mientes, cariño...
De sólo pensarlo las mejillas blanquecinas del hombre se tiñieron de un color rojo intenso...
De pronto llega una mujer, abre bruscamente la puerta y furiosa grita — ¡¿Qué le haces a esa estúpida muñeca de nuevo?!