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Desconocido.

-Cariño, cuando podremos dejar de escondernos-susurró mientras acariciaba mi desnudo pecho-

Bufé mentalmente. No me gustaba para nada que me llamará así, sólo una persona podía hacerlo.

-Pronto-dije sin más y pasé a levantarme.

Me puse toda mi ropa y sabía que aquella mujer me veía con suma atención. Tenía que cuidar mis acciones ya que ella era una maestra a la hora de leer a las personas.

Camine hacia ella y la besé rápido y fuerte, eso le gustaba.

-Pronto seremos tu y yo-susurré y camine a la puerta de aquel sucio motel para por fin largarme-

Era tan ilusa si pensaba que eso pasaría, ella sólo es un juego o bueno una forma de averiguar más.

De camino a mi carro le robó un par de sonrisas a varias chicas con las que me cruzo.

Subo a él y conduzco por las ya conocidas calles.

Aparco unas cuadras antes de la casa donde vive mi amada princesa y me bajo.

Camino con cuidado, pero no me preocupo ya que es de madrugada y nadie va a verme a menos que sea alguien tan loco como yo de salir a estas horas.

Agradezco que frente a la casa este ese vacío lugar lleno de arbustos y maleza, de otra forma tendría que buscar otro lugar donde esconderme.

Recuesto mi espalda en un tronco y observó detenidamente.

La casa está a oscuras, excepto por la de su cuarto.

Se mantiene así por un rato hasta que veo como un pequeño cuerpo se acerca a la ventana para abrirla.

Mis puños se aprietan de furia al ver como abraza a un tipo, alguien que conozco bien.

Sus brazos rodean su pequeña cintura y trato de contenerme y no ir a partirle la puta cara.

Se separan y el baja por un árbol que da a su ventana, lo veo irse coriendo y como ella espera a que ya no pueda verse para soltar un suspiro y una sonrísa.

Aprieto mi mandíbula.

¿Por qué sonríes? ¿Estás enamorada de él?

Pequeña zorra.

Observa el cielo con esa estúpida sonrísa que deseo borrarle a azotes para hacerle saber quién es su dueño.

Se aparta y apaga la luz dejando con ella abierta la ventana.

Mala idea princesa, dejaste abierta la puerta para un monstruo.

Espero a que se duerma y subo por el árbol.

La entrada es sencilla, haciéndo así más fácil mi plan.

La habitación es iluminada por la luz de la luna que da directo a su cama.

La miro dormir, su cuerpo medio tapado por una sábana haciendo visibles sus pequeñas curvas llamando mi atención.

Su rostro se ve tranquilo, como si de un ángel se tratara.

Rozo mi pulgar con su mejilla y acercó mi rostro al suyo para presionar mis labios con los suyos haciendo leve fuerza.

Me apartó y me marcho.

Descansa mi princesa, descansa ahora que puedes.

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Los amo, voten y comenten.
Nos leemos pronto.❤

Mi Luz✔ [TM#2] TERMINADA SIN EDITARDonde viven las historias. Descúbrelo ahora