El Retrato //Larry Stylinson\\ (O.S.)

Uno

Éste es el cuarto museo que visito y definitivamente estoy seguro de que esto es lo que quiero hacer por el resto de mi vida. Me apasiona esto más que cualquier otra cosa, no hay nada que disfrute más que tomar fotografías y visitar museos.

Conocer la historia de cada pintura es simplemente exquisito para alimentar el conocimiento.

Verifico la hora en el Big Ben al pasar por ahí; marca las doce y cuarto. Es buena hora para ir al museo, después ir a comer algo y de compras.

Siempre había querido visitar la Galería Nacional de Londres,  pues es el museo de artes más sobresaliente en Westminster.

Mi corazón se acelera al ver las enormes pilastras de la entrada y late aún más fuerte cuando ya he entrado. La cúpula sobre mí hace que se vea aún más alto de lo que en realidad es. Todo es simplemente perfecto, todos los cuadros en la pared son impresionantes.

Me detengo a desactivar el flash de mi cámara antes de tomar una fotografía a la pintura de Los Girasoles de Vicent Van Gogh; es una de mis pinturas favoritas junto a la Noche Estrellada.

Sigo caminando y recorriendo el resto del museo, casi he terminado, me faltan dos salones más, pero me detengo al darme cuenta que me ha hecho falta una pilastra casi al final de una pared.

Me acerco y puedo percatarme de que no la había visto antes, ya que ni siquiera es una pintura, sino una fotografía y no tiene nombre. La etiqueta que está a un costado es de papel, no es una placa grabada como las demás.

By: Niall Horan. Es lo único que se logra leer en el papel

Es el retrato se trata de un hombre de veintitantos años –aproximadamente– lo suficientemente atractivo, sentado en una silla de cuero negra, exhalando el humo de un cigarrillo que sostiene en su mano izquierda con un 28 tatuado en sus dedos, su mirada está completamente centrada en el humo que sale de su boca pero pareciera que su mente se concentraba en posar para la foto.

¿Pero que hace aquí este retrato si el personaje no corresponde a la época de todas las demás pinturas? ¿Y porqué está aquí si es una fotografía, no una pintura? ¿Quién es Niall Horan? ¿Y quién es el modelo?

Es tanta la intriga que tengo, que prefiero preguntar a uno de los encargados del museo.

–Señorita, disculpe que la moleste —le llamo amablemente a una señorita que se encuentra cerca.

–Dígame, joven —responde atentamente— ¿En qué puedo servirle?

–¿Sabe usted el origen del retrato en esa pared? —señalo la pared que está a menos de 10 metros de nosotros.

–Oh, en realidad no tengo idea. Solamente sé que llegó hace apenas una semana —responde simple.

–¿Pero cómo es que está en el museo sin descripción? Además de que es una fotografía y no una pintura.

–Me parece que hubo un arreglo con el encargado del museo, no estoy segura.

–Bien. ¿Quién es el encargado del museo? —pregunto insistente.

–Lo lamento joven, pero desconozco esa información.

–Bueno, muchas gracias —finalizo rendido.

Me retiro de ahí volviendo nuevamente al lugar del retrato. Nadie lo mira. Y con justa razón si nadie lo conoce.

Tomo una fotografía del retrato y el nombre que tiene por un lado.

Sigo mirando las demás pinturas pero ya no logro concentrarme. Las dudas invaden mi mente y casi sin pensarlo salgo del museo y me dirijo a un restaurant que está cerca del lugar.