un universo paralelo

CAPITULO IV

Antes de salir, Aurora fue hasta donde estaba su armadura, la misma forma un León, poso sus manos sobre ella. De repente, un aura dora comenzó a brillar entre ellas, en eso la chica empezó a escuchar la vos de su madre: Aurora hija mía, estoy tan orgullosa de ti-a lo que ella le dice: mama tengo tanto miedo de lo que puede pasar, además he encontrado al joven que tanto he buscado-una mezcla de felicidad, tristeza- te juro que no sé qué hacer-Diana: mi niña, no temas tu tia como yo estamos siempre contigo-Aurora siente como un caricia-él es tu destino Aurora- mira hacia un costado-creo que no estamos solas. - en eso la chica sale de su trance, ve Albión vestido con su armadura mirándola con una cara muy extraña junto a una ceja levantada: ¿Aurora te encuentras bien?; a lo que ella le contesta con lágrimas en los ojos: si si es que-silencio seguido de un suspiro- no se si podrás entender-se limpia las lágrimas-esta armadura perteneció a mi madre y a la madre de mi madre, cada una de ellas conforman el alma de la armadura. Generación tras generación de guerras-pausa, luego explica-cuando estoy muy triste o tengo alguna preocupación me pongo hablar con ellas-buscando comprensión-se que parece una locura, pero yo puedo sentir sus energías como resuena con la mía-baja la vista- Seguramente vas a pensar que estoy loca-lo mira con cara de puchero, a lo que el joven se acerca a ella, muy tiernamente le acaricia el rostro, contestándole: si a ti te hace bien quien soy yo para juzgarte, creo que ya es tiempo se irnos-.

En ese momento la chica llamo a su armadura, esta respondió, vistiéndola completamente, una vez que completo la transformación, lo miro sonrió comenzando a caminar. Ambos salieron del Lar, rumbo al salón de Deva.

Al llegar a este, las Valquirias se alinearon por clan, cuando detrás de la cortina apareció su Diosa Deva, junto a Sabrina la reencarnación de esta dimensión en ese momento Aurora dijo: Valquirias haru ju kay, larga vida a la Diosa Deva-todas, cada una de las guerras se inclinaron ante ella, comenzaron a llorar al ver a su Diosa. Ella se paró en frente diciendo: mis queridas Valquirias estoy tan feliz de poder estar con ustedes- realizo una pausa mirando Aurora- Leo de pie y acerca a mi- a lo que esta obedeció de inmediato. Al caminar hasta ella, Deva no aguanto, apresurando el encuentro para abrazarla diciendo: mi querida general que gusto de que este bien-cae una lagrima- Estaba muy preocupada por todas ustedes- al separarse del abrazo fraternal, la joven muy emocionada acento con la cabeza, diciendo: si mi señora también nosotras estábamos preocupadas por usted-pusa- ¿las demás cómo están? -pregunta ansiosamente

Deva: están bien-comienza a relatar- Rini se está recuperándose todavía. Transportarlas a ustedes hasta aquí le llevo mucha energía casi muere, pero por suerte ya está mucho mejor, Hakura estuvo un mes en coma por las heridas, pero está casi repuesta- realizo una pausa, mirando a las Valquirias llamo a cuatro más- Aries, Sagitario, Virgo, Capricornio conmigo- las cuatro respondieron rápidamente al igual que con Aurora las abrazo fraternalmente, tomando del brazo a Leo y a Sagitario las llevo hasta un balcón. Comenzó a explicarles lo pasos a seguir: mi visita a este universo es para advertirles, la guerra santa se aproxima mis Valquirias, esta Deva no es guerra es más bien pacífica, como mi reencarnación-muestra preocupación- anterior por eso necesito que la protejan, su participación es crucial-toma del hombro a Mina y Luna- Yo se que, les estoy exigiendo demasiado, pero es vital para que las perdidas sean nulas-esperanzada-Recuerden que tienen a los Fidalgos y Beatos eso es una ventaja-por ultimo-Traten de conseguir que ellos se pongan de acuerdo-bajo la vista, suspiro. En eso miro Aurora, la alejo un poco pregunta-¿encontraste lo que estabas buscando? -le pregunto con cara picara, a lo que Aurora le contesto: si mi Señora-satisfecha- pero estoy muy asustada- se sonrojo. La Diosa la miro, sonriendo: entiendo es normal al principio-conteniéndola- además tanto tiempo esperándolo, creo que no es parámenos, que te sientas así, yo también estaría aterrada como tú, es tiempo de volver al salón.

Cuando regresaron Deva miro a los Fidalgos, pidió al guardián del Lar de Leo que se ponga de pie, Este se ergio con la mirada al piso, la Diosa se acercó a él lo miro de arriba abajo le dio una vuelta observando hasta el último detalle cuando termino su inspección se acercó a su odio: Fidalgo, te concedo la mano de mi General más valiente, leal y digna-casi amenazando- más te vale que la cuides con tu vida sino te juro que vendré hasta aquí y are caer toda mi ira sobre ti-se aleja lo mira muy seria levantando la cera- espero que lo tomes como advertencia no como una amenaza- Albión se quedó Helado, la miro con un poco de temor, lo único que pudo hacer el valiente Fidalgo fue hacer una reverencia ante la implacable Diosa. Luego de esto Deva se dio media vuelta, camino hacia Aurora se detuvo frente a ella la miro, diciéndole: es muy guapo-con una sonrisa pícara agrego-además tiene lindo trasero-guiñándole un ojo. Al terminar la frase la Aurora soltó una pequeña carcajada.