Parte 9

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Me senté de nuevo en mi lugar y sentía la mirada de Mariana sobre mí, se veía un poco preocupada, porque el resto de la tarde me la pase sin hablar mucho y solo veía mi celular, para pasar el rato nada más, ya que me estaba aburriendo un poco, llego la noche y ellos se tuvieron que ir, también Rodrigo y Dayana se fueron, así termino el domingo, yo subí a bañarme y dormir para una nueva semana.

Al despertar, ya era un poco tarde, así que lo más rápido que pude me arreglé, porque mi papá me llevaría y ya estaba esperando, baje y nos dirigimos a su auto, ya adentro comenzamos a platicar.

-Sabes Romi, Rodrigo no es bueno guardando secretos – Me dijo mi papá y yo no entendía mucho.

- ¿Por qué lo dices? – le pregunte

- Antes de irse, me dijo que casi te besabas con tu maestra – soltó así sin más, tonto rodrigo.

- ¿Qué? Bueno, casi paso, pero no tengo nada con ella papá – le dije un poco nerviosa, mis papás ya sabían que también me gustaban las chicas y fueron muy lindos cuando se los dije.

- Si tienes algo con ella, solo ten cuidado hija, se puede prestar para malentendidos – dicho esto llegamos a la uni – Excelente día princesa.

- Gracias papá, igualmente – me despedí y bajé del auto, más tarde hablaría con Rodrigo, iba metida en mis pensamientos, cuando de repente alguien se cruza en mi camino y me espante un poco.

- ¿Estoy tan feo para qué te espantes? – me pregunto Manuel con su cara tan tierna

- Claro que no, ¡estas precioso! – Solo que venia pensando en otras cosas.

- ¿Cosas con la maestra Mariana? Adivina quien paso anoche por tu casa y la miro salir de ahí junto con otras personas – dijo con cara divertida

- ¿La viste? – me reí un poco- pues resulta que es hermana de un amigo de Rodrigo

- Ay ajá, esa ni tu te la crees

- En serio, yo ni enterada de que iba a ir a mi casa – le dije ya un poco más seria.

- Te creo, solo un poquito – solo me reí y de a poco fueron llegando todos mis amigos, excepto rafa, lo cual se me hizo muy raro, ya que hasta Carlos estaba con nosotros, ya era hora de entrar a clase, estábamos a punto de comenzar cuando llego él, se sentó lejos de nosotros, aun mas raro de él, decidí que no iba a hablar con él, creo que no tenia caso, solo iba a dejar pasar lo del viernes en la noche.

Ya era hora de tomar nuestra clase con Mariana, y recordar lo que Rodrigo me propuso el día de ayer aun me daba risa, pobre Mariana, se miraba preocupada, ya íbamos a entrar, pero antes todos nos quedamos comentando lo raro que estaba rafa, ya que en toda la mañana no nos habló, seguimos platicando y en eso llego Mariana.

-Ya no es hora de platicar muchachos – nos lo dijo en un tono algo seria, toda la clase estuvo un poco de mal humor, tal vez algo le paso, así que todos estuvimos muy atentos, ahora si hasta yo, ya que tenia que poner atención a sus clases y así termino la clase. 

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